Debido a la denuncia hecha por los profesores sobre la disminución de carga horaria como medida de castigo para quienes participaron de la paralización docente a fines del año 2014, y que estaría afectando a cerca de 80 profesionales, el alcalde de Puerto Montt hizo un llamado a la calma.
Gervoy Paredes aseguró que no habrán despidos, ni persecución, para quienes participaron de las movilizaciones porque los directores de los establecimientos no pueden pasar por sobre las decisiones del departamento de educación municipal, agregando que no va a aceptar este tipo de medidas vengativas.
En tanto la vocera de la asamblea de base comunal de los docentes en Puerto Montt, Eugenia Antinopay, valoró el respaldo del alcalde, sin embargo, denunció que los directivos que están realizando estas acciones como medida de represión, no pueden continuar ejerciendo cargos de liderazgo.
En total serían 12 establecimiento en donde los directivos habrían tomado estas decisiones, correspondientes a la escuela Kimun Lawal, colegio Dario Salas, escuela Santa Inés, liceo rural Piedra Azul, escuela Arturo Prat Chacón, escuela Cayenel, escuela Pablo Neruda, escuela Chiloé, liceo Andrés Bello, liceo comercial Miramar, escuela La Chamiza, y escuela rural Maille Estero y que ahora deberán dialogar la medida con el Departamento de Educación Municipal.
