El proyecto de Uruguay para recibir a unos 120 sirios está “bien encaminado” y será presentado ante el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), informó el miércoles el canciller uruguayo, Luis Almagro.

“Hemos resuelto los temas presupuestales, los temas logísticos, los temas de apoyo” y se espera que “en un par de semanas tengamos resuelto el tema de la visita al Alto Comisionado y la posterior misión a Líbano”, comentó Almagro a periodistas.

A Uruguay llegarán unas 120 personas, “familias en estado de vulnerabilidad y eso implica composiciones de diferentes características, pueden ser (niños) acompañados por un primo mayor, una viuda con hijos, una abuela con nietos, pueden ser diferentes esquemas”, agregó el diplomático.

Hace unos dos meses, el presidente uruguayo, José Mujica, llamó a sus compatriotas a socorrer a alguno de los miles de niños abandonados en los campos de refugiados alrededor de Siria.

Almagro participó el miércoles en los festejos locales por la conmemoración del Día Mundial del Refugiado -que se celebra el 20 de junio- junto a la Representante Regional de Acnur para el Sur de América Latina, Eva Demant, y el actor uruguayo Osvaldo Laport, Embajador de Buena Voluntad de Acnur.

Demant evitó fijar plazos para la llegada de los refugiados al país, pero remarcó que “cuanto más rápido se pueda hacer, mejor”.

Demant recordó que “hay millones de refugiados que están principalmente en los países vecinos, Líbano, Jordania, Turquía”, entre otros, y que este año se busca reasentar -llevar refugiados a un tercer país- a unas 30.000 personas.

Al respecto, Almagro resaltó que las autoridades uruguayas están dispuestas “a aceptar reasentamientos pero también estamos dispuestos a recibir a refugiados nuevos, y recibir esos refugiados nuevos implica agarrar gente que anda en banda (sin rumbo) por ahí, que no tienen una situación estabilizada”.

Más de 150.000 personas han muerto desde el inicio en marzo de 2011 de la guerra en Siria, según una ONG. Unas 6,5 millones de personas han sido desplazadas en el interior de Siria y 2,6 millones han huido del país, generalmente hacia estados vecinos, como Líbano y Jordania, además de Turquía, según datos de la ONU.