Un joven mexicano de 13 años, que había sido secuestrado por un grupo criminal coordinado por el ex novio de su abuela, fingió su muerte y logró escapar de sus captores, que le habían propinado 25 puñaladas superficiales, informó este viernes la fiscalía de Puebla.

El menor fue interceptado por dos sujetos el pasado 29 de enero cuando se dirigía a su escuela en el municipio de Acatzingo, en un crimen que fue dirigido por la “ex pareja sentimental de la abuela de la víctima, Jesús Huerta Gonzáles, alias ‘El Cebollín’”, explicó Fernando Rosales, vocero de la procuraduría.

Pese a que la abuela pagó los 45.700 pesos mexicanos (unos 3.400 dólares) de rescate que pedían los captores, estos le propinaron “más de 25 puntadas en diferentes partes del cuerpo” al chico, que consciente que la tortura seguiría decidió fingir su muerte mientras estaba retenido en un cerro.

Entonces, “fue abandonado y, al darse cuenta que ya no se encontraban cerca sus secuestradores, se dirigió a su domicilio” y fue posteriormente trasladado en el hospital, donde se encuentra estable recuperándose de las lesiones, relató el funcionario.

Con los datos ofrecidos por el menor, las autoridades lograron capturar a los secuestradores, que ya se encuentran a disposición de la fiscalía.