El consorcio encargado de la ampliación del Canal de Panamá propuso este lunes sin éxito a la administración de la vía interoceánica cofinanciar 1.600 millones de dólares de presuntos sobrecostos y prorrogó su advertencia de parar las obras si no se le conceden esos fondos.

“La propuesta de GUPC (Grupo Unidos por el Canal) consiste en el cofinanciamiento de los costes imprevistos para continuar las obras”, aseguró el consorcio en un comunicado difundido anteriormente en Madrid.

Sin embargo, el consorcio no dio detalles de la fórmula que se utilizaría ni las cantidades que aportarían cada una de las partes para financiar ese sobrecosto de 1.600 millones de dólares.

Según el consorcio, si se cofinancian los costos imprevistos que han surgido en las obras se podrá “alcanzar el cumplimiento del proyecto en 2015″. De lo contrario se podrá “afectar al proyecto” por la “difícil situación financiera en la que se encuentra” la empresa.

Sin embargo, la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) rechazó de inmediato esa propuesta.

“No hay ninguna posibilidad de hacer acuerdos fuera del contrato. Además, las propuestas deben ser presentadas formalmente”, contestó la ACP en un breve comunicado.

El consorcio además “prorroga el preaviso dado para una posible suspensión de las obras”, aunque no da detalles ni concreta las nuevas fechas.

Las obras de ampliación del Canal de Panamá siguieron este lunes, aunque a baja intensidad.

GUPC, liderado por la empresa española Sacyr y formado también por la italiana Salini Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana (CUSA), informó el domingo que no contemplaba paralizar las obras, pero aclaró que “podrá evaluar la situación y tomar la decisión que corresponda en cualquier momento”.

El consorcio amenazó el 30 de diciembre con suspender las obras si antes de esta fecha la ACP no le reconocía un sobrecosto de 1.600 millones de dólares sobre el valor original de la construcción de las nuevas esclusas (3.200 millones), principal proyecto de la ampliación, que tiene un costo total de 5.250 millones.

GUPC “no está pidiendo beneficios extra, solamente el cofinanciamiento mientras espera la decisión sobre los mismos del arbitraje internacional”, asegura el comunicado.

“En caso de que no se llegue a ningún acuerdo sobre la financiación, las obras no terminarán en los plazos previstos y supondrá un grave retraso”, añade.