Ruido y críticas generó la lista de preseleccionados por la Corte Suprema para unirse al tribunal de alzada de Concepción como abogado integrante, al incluirse en las ternas a tres ex ministros, los cuales jubilaron al cumplir 75 años de edad.

Cada año son elegidos 9 abogados integrantes para colaborar a la Corte de Apelaciones penquista. Ellos son llamados cuando algún ministro titular se ausenta y así pueda mantenerse el funcionamiento de las seis salas que tiene el tribunal de alzada local.

En la selección interviene la Corte Suprema, que para el caso de Concepción confecciona 9 ternas, las que son enviadas al Ministerio de Justicia, donde se elige finalmente al abogado integrante.

Los cuestionamientos al proceso este año surgen a partir de lo ocurrido en la primera, séptima y octava ternas, en las que se incluyó en primer lugar a un ex ministro de la corte penquista, recientemente jubilados al cumplir 75 años, como son Sara Herrera, Eliseo Araya y Juan Rubilar.

El abogado constitucionalista, Fernando Saenger, explicó que la ley que impuso el retiro para los jueces -promulgada en la década del 90- tenía como objetivo permitir el ascenso de los jueces en su carrera dentro del Poder Judicial y que ahora con la posibilidad de permitir a los jubilados a regresar, se vulnera el objetivo de la normativa.

Otros profesionales lamentaron que se privilegie a ex ministros por encima de profesionales jóvenes y con experiencia, lo que -dijeron- desincentiva y desanima a quienes tienen interés en desempeñarse en el Poder Judicial.

La inclusión de ex jueces primero fue objetada en el pleno de la Corte de Apelaciones de Concepción por los ministros Mathilde Esquerré y Rodrigo Cerda, este último presidente de la Asociación Nacional de Magistrados. Luego en la Corte Suprema, las ternas con los nombres de los ex ministros tuvieron el voto en contra del suplente Carlos Cerda.