El Fondo Monetario Internacional observa una situación económica “insostenible” en Venezuela, que registra la mayor inflación de América Latina y escasez de productos básicos, estimó este viernes una alta funcionaria del organismo.

“Es una situación difícil, probablemente insostenible”, dijo en rueda de prensa Adrienne Cheasty, subdirectora del FMI para las Américas, al margen de la asamblea del Fondo y el Banco Mundial en Washington.

El director de ese departamento del FMI, Alejandro Werner, también describió un panorama sombrío para la economía del país suramericano.

“Vemos que los desbalances macroeconómicos en Venezuela se hacen más anchos y más anchos, las cifras de inflación han escalado significativamente, la escasez y los cuellos de botella en la economía se han agudizado”, dijo Werner en la misma conferencia de prensa.

La inflación anualizada en Venezuela rozó el 50% en septiembre, la mayor en América Latina, luego de registrar un aumento de 4,4% sobre el mes anterior, informó el jueves el Banco Central venezolano (BCV).

“La situación se está complicando cada vez más y eventualmente un ajuste significativo será necesario” porque lo que se ha hecho hasta ahora “no es suficiente”, señaló Werner.

Werner recordó que el Fondo no obtiene información directamente del gobierno venezolano, que rechaza toda evaluación de la economía del país por el organismo internacional desde hace siete años.

A pesar de su oposición a las recomendaciones del FMI, Venezuela nunca se retiró de la institución como amenazaba el fallecido presidente Hugo Chávez.

Venezuela cerrará 2013 con la menor tasa de crecimiento de la región (exceptuando algunos países del Caribe) con un 1%, según el FMI, aunque es mejor a la previsión de 0,1% que el organismo publicó en abril.

El Fondo estimó entonces que el nuevo gobierno del presidente Nicolás Maduro, electo en abril, aplicaría una reducción del gasto público, lo que no ha ocurrido.

“El mayor crecimiento está impulsado por el motor del gasto” público, explicó Cheasty.

Venezuela, principal productor de crudo de Sudamérica y que alberga las mayores reservas del mundo, creció un 1,6% en el primer semestre de 2013, cuatro puntos porcentuales menos que en el mismo periodo del año pasado.

Los venezolanos han enfrentado desde hace años la ausencia cíclica de alimentos como café, harina, azúcar y aceite o de productos de higiene personal como papel sanitario, mientras que algunos hospitales denuncian la falta de insumos.

El deterioro de la economía se debe en parte a la falta de dólares en un país que depende en gran medida de las importaciones y donde opera desde hace una década un férreo control de cambio.

Aunque el gobierno venezolano culpa de la crisis de alta inflación y escasez de productos a un “sabotaje económico” que le achaca a la oposición.