En el segundo tiempo del partido entre Universidad Católica y O’Higgins el pasado sábado en San Carlos de Apoquindo, hubo un jugador que se robó todas las miradas por su rendimiento sobresaliente en los cruzados.

Y es que cuando la UC caía por 2 a 0 de manera inapelable, el argentino Tomás Costa prácticamente se “echó el equipo al hombro” y terminó contagiando a sus compañeros, quienes casi lograron el empate en el tramo final del cotejo.

El esfuerzo del rosarino tuvo su recompensa desde la galería, pues abandonó la cancha bajo una ovación de los fanáticos universitarios.

A tres días de que Católica perdiera su invicto y con Sao Paulo en el horizonte por la Copa Sudamericana, Costa sostuvo que “a nadie le gustó perder la semana previa… pero me parece que un momento justo para que nosotros demostremos personalidad y para mostrar que venimos bien”.

En cuanto a los brasileños el centrocampista cruzado le bajó a perfil a que no vengan bien en el torneo local porque “es un torneo diferente”, y añadió que ellos tienen a su favor que han jugado menos minutos en la temporada y que cuentan con jugadores desequilibrantes.

El argentino destacó el nivel de algunos de sus adversarios del actual Sao Paulo como Lucio y Luis Fabiano, aunque también explicó que Católica tiene muchas más variantes en comparación al equipo del 2012 -que quedó eliminado en semifinales por los mismos brasileños- pues se encuentran todos en óptimas condiciones físicas.

Lo más importante para la escuadra precordillerana, según Costa, es traer la serie abierta para que sea definida en San Carlos de Apoquindo. Eso sí, también reconoció que puede ser un “arma de doble filo”, ya que probablemente “la presión que vamos a tener a la vuelta será mayor”.

Consignar que Universidad Católica viajará este martes a las 20:00 horas a Brasil, para enfrentar el próximo jueves a contar de las 21:15 a los tricolores en el Estadio Morumbí.