El cineasta ruso Alexei Guerman, de 74 años de edad, un “monstruo sagrado” del cine soviético y ruso, murió el jueves según indicó su hijo.

Guerman nació el 20 de julio de 1938 en Leningrado, hoy San Petersburgo. Era hijo del escritor y guionista Yuri Guerman.

“Alexei Guerman era un ‘monstruo sagrado’ del cine soviético y ruso (…), el último heredero de la cultura elitista soviética”, declaró a la AFP el crítico de cine Mijail Trofimenkov.

La muerte de Guerman, discípulo de célebres cineastas soviéticos como Grigori Kozintsev y Gueorgui Tovstonogov, marca “el fin de una época”, agregó.

“Era único. ¿Qué más se puede decir sobre el talento artístico de este hombre?”, declaró por su parte el cineasta ruso Alexander Sokoruv.

Censurado en varias oportunidades, Guerman dirigió películas como “Veinte días sin guerra” (1976) o “Mi amigo Ivan Lapshin” (1984).

“Cada una de mis películas llevó a que me despidiera el estudio en el que trabajaba, pero, después de un tiempo, se me proponía un nuevo proyecto”, había contado Guerman en 2008, durante los Encuentros Cinematográficos de Seine-Saint-Denis (Francia).

“La incompetencia de los funcionarios que tienen que aplicar las leyes rusas suaviza la dureza de las mismas”, había agregado.