Los trabajadores de la empresa Redbus, que presta servicios al Transantiago, se encuentran en un proceso de fiscalización en su terminal de Huechuraba, en Santa Marta.

Según los funcionarios muy pocas máquinas se encuentran en óptimas condiciones para circular por las calles de la capital, por lo que paralizaron el flujo de buses.

Sólo 7 máquinas de un total de 120 han salido desde el terminal. Las demás, denuncian, cuentan con dificultades en sus frenos, luces, carecen de botiquín, extintor, entre otras.

Para los trabajadores, esta dificultad pone en peligro a los usuarios, tal como sucedió la semana pasada, cuando un chofer, a raíz de las falencias en el bus, atropelló y dio muerte a un transeúnte.

Así lo comentó Luis Díaz, uno de los dirigentes de Redbus, quien aseguró que se vieron en la obligación de aplicar esta medida extrema.

El representante aseguró que han hecho la denuncia con la gerencia y en las reparticiones competentes, pero que no han recibido respuesta.

Al respecto, el coordinador del Transantiago Patricio Pérez señaló que Redbus cuenta con las máquinas más modernas, por lo que calificó como un boicot el paro de actividades.

La autoridad vial no descartó acciones legales contra los dirigentes.