A tan sólo días de la balacera en pleno centro de Valparaíso, cuando las policías anuncian planes de contingencia en el sector de calle Uruguay y la Gobernación confirma la presentación de una querella, surgen nuevos antecedentes del hecho, donde la versión de la familia del hasta ahora único imputado como autor material de los disparos asegura que es inocente.

El día en que ocurrió el tiroteo la confusión se apoderó de las calles porteñas a una cuadra del Congreso Nacional; las primeras versiones indicaban que se trataba de una riña entre comerciantes ambulantes, hipótesis que hasta ahora maneja la policía.

Los hechos se originaron la mañana del lunes, cuando un hombre habría sido agredido en el sector. El sujeto se retiró del lugar y habría vuelto cerca de las 14:30 horas con una escopeta, disparando contra el grupo de comerciantes.

Posteriormente, el hombre habría emprendido la fuga por calle Uruguay, siendo interceptado en Victoria por familiares de los heridos y algunos transeúntes, donde se efectuó su detención. En esos momentos, el individuo habría estado acompañado de una mujer, la que se dio a la fuga.

Aquel día, el comandante Fernando Bywaters, prefecto de Carabineros de Valparaíso indicó que los disparos se habrían efectuado tras la discusión y luego de la detención ciudadana.

Versión que no concuerda del todo con la entregada por Juan Brito, familiar de uno de los heridos, quien aseguró que el joven disparó primero, huyendo y siendo finalmente detenido por los transeúntes.

En primera instancia se había dicho que el autor de los disparos era un menor de 15 años; sin embargo, se aclaró que se trataba de un hombre de 22, Emilio Díaz Labra. Hasta este miércoles, la mujer que lo acompañaba se mantenía inubicable.

Inés, mechera y “descuidista” (hurtos a personas que descuidan sus pertenencias) en conversación exclusiva con La Radio relató su testimonio de los hechos, el que si bien aclaramos sólo se trata de una versión de lo ocurrido aquel lunes 7 de enero, no deja de llamar la atención por la crudeza de su relato.

Según la mujer, el día de la balacera se encontraba en las inmediaciones de la plaza O’Higgins cuando Yerco, hermano de su pareja Emilio, habría sido agredido por los comerciantes ambulantes del sector. Ante esta situación, la mujer junto a otra persona lo trasladaron al Hospital Carlos Van Buren. Hasta ese momento, Emilio aún no llegaba a la plaza.

Tiempo más tarde y de vuelta al sector, Inés denunció que fue agredida por una mujer cercana a los comerciantes ambulantes.

Posteriormente llegó su pareja, decidiendo ambos retirarse a Viña del Mar a “trabajar”, momentos en que dijo escucharon disparos (presuntamente los que hirieron a las personas).

Producto de la balacera, la pareja habría huido hacia calle Victoria, donde uno de los participantes de la pelea original le habría entregado a “El Milo” la escopeta con la que asegura disparó al aire para evitar a la turba de 30 personas, entre comerciantes ambulantes y transeúntes.

La mujer reconoce que tiene 41 días pendientes de condena por hurto, razón por la que recurrió a la prensa para entregar su versión, ya que teme que al presentarse a declarar este jueves sea trasladada a la cárcel de Valparaíso, donde estaría amenazada de muerte. Por ello hasta ahora, aseguró, se mantiene en la clandestinidad.

Escuche aquí la entrevista completa a la mujer más buscada en los últimos días en Valparaíso, tras haber participado del hecho policial que mantiene conmocionada a la ciudad puerto.