Cerca de 70 personas pertenecientes al campamento San Antonio, entre los que se contaban niños y adultos, realizaron una protesta con quema de neumáticos por aproximandamente dos horas en la intersección de las calles La Misión y Los Eucaliptus, en la población Schilling. Esto, en demanda de una solución eléctrica luego de que 13 de ellos fueran detenidos por personal de la Policía de Investigaciones tras detectar conexiones ilegales al tendido eléctrico.

La molestia de los pobladores creció luego de que Saesa cortara el suministro en el campamento, dejándolos sin electricidad y registrándose incluso la quema de artículos domésticos. Por ello, decidieron salir en masa a exigir una solución real a la problemática, llamando a hacerse presente a la empresa eléctrica, el municipio y la Gobernación Provincial.

Así lo explicó a Radio Bío Bío Marcia Soto, presidenta del campamento San Antonio, quien además hizo ver la dificultades que conlleva la falta de electricidad, sobre todo porque se trata de 30 familias vulnerables en las que, incluso, se encontrarían personas con serias enfermedades.

Al respecto Pedro Cárcamo, representante de Saesa, sostuvo en conversación con Radio Bío Bío que la problemática es precisamente la no regularización de las conexiones existentes. En este proceso el campamento no ha sido involucrado como otros asentamientos de la ciudad, con ayuda tanto de la Gobernación Provincial como del municipio local.

Rodrigo Kauak, gobernador de Osorno y uno de los más requeridos a hacerse presente por los manifestantes, dijo a La Radio que la responsabilidad recae directamente en el municipio de Osorno, porque éste no habría cumplido un compromiso acordado hace cuatro meses con los habitantes del campamento y que buscaba precisamente la regularización de sus conexiones eléctricas.

Desde la otra vereda, en tanto, respondió Hardy Vásquez, alcalde subrrogante del municipio de Osorno, quien sí llegó hasta la intersección cortada por la protesta y conversó con los vecinos.

A su juicio, el tema no es de la Municipalidad sino del Gobierno y su política habitacional, la cual –dijo- no ha avanzado en el último tiempo y produce que la gente deba suministrarse ilegalmente electricidad.

Pese a ello, comprometió una reunión a primera hora en las dependencias de la institución, la cual congregará a dirigentes del campamento, representantes de Saesa y del municipio.

Tras dicho acuerdo, más el compromiso conseguido por parte de Saesa de no acudir al sector a suspender el suministro, los integrantes del campamento San Antonio finalizaron la protesta.

No se registraron lesionados ni detenidos, mientras que Carabineros no requirió la presencia de Fuerzas Especiales, aún cuando monitoreó constantemente la situación e implementó medidas para el desvío del tránsito.