Las directivas de la DC y RN realizaron un seminario para concretar el acuerdo que tomaron en enero de este año de promover una serie de modificaciones al régimen político.

En el encuentro participaron integrantes de sus mesas directivas, parlamentarios y expertos de sus centros de estudio.

Resolvieron que estos últimos, el Instituto Libertad y el Centro Democracia y Comunidad, elaboren conjuntamente una agenda legislativa que incluirá la creación de la figura del primer ministro, la elección popular de los gobiernos regionales y el cambio del sistema binominal por uno proporcional corregido.

El entendimiento entre la Democracia Cristiana y Renovación Nacional genera suspicacias en sus respectivas coaliciones. Sin embargo, el presidente de la DC, Ignacio Walker, insistió en que es un acuerdo que se hace cargo de la demanda ciudadana de más participación, pero no significa que ambos partidos pierdan sus identidades.

Tres de los vicepresidentes de la DC, Fuad Chahín, Víctor Torres y Laura Albornoz, se ausentaron de la cita molestos porque el presidente de Renovación Nacional, Carlos Larraín, habría pedido garantías a Walker de que la acusación constitucional contra el ministro Rodrigo Hinzpeter no es una posición institucional de la colectividad.

Según Chaín, el máximo dirigente de RN parece querer pasarse de listo extendiendo el acuerdo sobre reformas políticas a otros temas.

El senador Carlos Larraín respondió que el acuerdo con la Democracia Cristiana está lejos de convertirse en un matrimonio y sólo es un diálogo entre ambas fuerzas políticas.

El diputado socialista Marcelo Díaz se declaró escéptico de que este acuerdo entre la DC y RN prospere, por sus dudas sobre la real voluntad del partido oficialista.

Además, cuestionó que la Democracia Cristiana entre en este diálogo sin una conversación previa con el resto de la concertación.

Los dirigentes de la DC y RN aseguraron que este entendimiento está abierto también a que se sumen la UDI y también fuerzas de la concertación.