El tricampeón de rally nacional Cristóbal Vidaurre dijo adiós al Dakar 2012, luego de terminar en 28 horas una séptima etapa que lo llevó a pasar la noche en el Desierto de Atacama al enfrentar problemas de temperatura por segundo día consecutivo.

Vidaurre expresó su tristeza por lo ocurrido, pero al mismo tiempo se mostró satisfecho con su actuación. “Estoy triste, mi meta era llegar a Lima, esto no era lo que tenía como meta, pero al mismo tiempo estoy contento con lo que hice, los resultados de los primeros días de carrera, cómo me sentí con el auto y cómo respondí a la exigencia, sacando adelante una etapa complicada, de 28 horas, con todos los puntos marcados”, dijo.

El piloto de AutoGasco valoró eso sí el esfuerzo del equipo y sus mecánicos al resaltar que “hicieron lo mejor para entregarme un buen auto, pero al final lo que nos pasó a mí y a mi coequipo Jorge Latrach con las temperaturas y el motor fue bastante anormal y difícil de enfrentar”.

Vidaurre, campeón de la categoría N4 el 2011 en el Rally Mobil, aseguró que se adaptó bien en su debut en este tipo de carreras, y destacó el enfrentar de buena forma la dureza de la competencia.

“Yo sabía a lo que venía, me adapté rápido al circuito y a la dinámica de la carrera. Como enía, hubiera sido un muy buen Dakar, tal vez demasiado fácil en las primeras etapas en que lograba buenas posiciones. El Dakar no me mostró hasta bien adelante lo duro que es, una carrera de resistencia, que te pone a prueba como persona y psicológicamente, lo viví súper a concho y me sentí bien preparado”, explicó.

Cristóbal Vidaurre resaltó que se sintió bien en la conducción, hizo buena pareja y manejaron bien las situaciones con su navegante Gustavo Beccaria, no tuvo agotamiento físico y anduvo rápido y con un manejo confiable.

“Demostré la confiabilidad que he tenido a lo largo de mi carrera. Un ejemplo, reventé apenas un neumático en siete etapas, con terrenos que eran para romper todos los días. Salvo la temperatura no hubo que cambiarle nada, no dañé el auto y me quedé con ganas de haber seguido mostrando esas cualidades”, señaló.

Por lo mismo, Vidaurre sostuvo que se va “con hambre y con ganas de hacerlo de nuevo y mejor. Pero aún así, fue una excelente etapa de aprendizaje, me voy feliz con lo aprendido y sé que estoy en condiciones de afrontar una carrera de este tipo con un prisma diferente, mucho más claro y definido y con más conocimiento y seguridad”.