Los dueños y jugadores de la NBA volvieron a fracasar este martes en tratar de encontrar una solución al paro laboral, con peligro de cancelación para la temporada del 2011-2012.

Ambas partes no pudieron ponerse de acuerdo en avanzar hacia la firma de un nuevo convenio laboral, y el presidente de la Unión de Jugadores, el armador de los Lakers, Derek Fisher, advirtió que se podría cancelar la próxima temporada.

Los partidos de la temporada regular podrían quedar en riesgo muy pronto, pues las conversaciones se rompieron y no se pactaron nuevas reuniones.

El director general de la asociación de jugadores Billy Hunter dijo que el próximo encuentro se realizaría dentro de uno o dos meses.

“No tenemos opciones, pero hay que cancelar las dos primeras semanas de temporada regular”, dijo por su parte David Stern, comisionados de la NBA.

Los propietarios de equipos previamente habían cancelado los campos de entrenamientos y 43 juegos de pretemporada hasta el 15 de octubre, pero con los resultados de la reunión este martes Stern señaló que el impacto en pérdidas serían de unos 200 millones de dólares.

Los jugadores habían ofrecido reducir sus ganancias garantizadas y relacionadas con el básquetbol del 57 al 53 por ciento. Consideraron que ello daría a los dueños más de 1.000 millones de dólares en seis años.

Sin embargo, los agremiados dijeron que la última propuesta de los dueños apuntaba a que esas ganancias se redujeran al 47%.

“Hoy no fue el día para que lográramos esto”, dijo Fisher después de que ambas partes se reunieron durante más de cuatro horas. “No fuimos capaces de acercarnos siquiera a una reducción de la brecha que hay entre nosotros”.

Los jugadores consideran que han cedido ya lo suficiente en materia económica. Hunter dijo que su oferta de reducción de ganancias garantizadas se habría traducido en por lo menos 200 millones de dólares por campaña, una parte significativa de los 300 millones que los dueños dicen haber perdido en la temporada anterior.

La NBA ya ha cancelado 43 partidos de pretemporada y ahora el inicio de la campaña regular está en peligro si no se llega a un acuerdo, y podría suceder lo mismo que en la zafra de 1998-1999, cuando se jugó un campeonato acortado debido a otro paro laboral.