Satisfacción existe en el Sename por las condenas ejecutadas contra sujetos vinculados con abusos sexuales en contra de las menores del hogar “Capullo”, de Chiguayante. Un noveno implicado arriesga 15 años de cárcel.

Conocida la explotación sexual de menores del hogar Capullo del Sename, comenzó su reestructuración y a sumarse las querellas en contra de los culpables.

La directora regional, Jessica Flores, se mostró satisfecha tanto por los cambios del hogar, como por las condenas; dos con pena remitida y una tercera efectiva, por delitos de estupro reiterado, corrupción de menores y facilitación de menores para la prostitución.

Lo más importante, indicó, es que las niñas vulnerables tomaron conciencia de su explotación.

El noveno condenado, este por juicio oral, fue José Morales Valdés, de 63 años, por violaciones reiteradas y estupro reiterado. El fiscal Carlos Plama pide 15 años de cárcel, resaltando que integró un circuito ilegal más que una red.

En el mismo plano, la carrera de educación parvularia de la Universidad San Sebastián hizo una convocatoria sectorial a Junji, Integra y Mineduc, para que las parvularias adviertan señales de abuso en los menores y otras vulneraciones de derechos, explicó Andrea Garrido, jefa de carrera.

En el caso del circuito ilegal, resta todavía el juicio oral de dos choferes de la locomoción colectiva de Penco, los últimos implicados en los abusos a las menores del Sename chiguayantino.