Parlamentarios de la Alianza pidieron al nuevo gobierno analizar la posible alza de la bencina. Mientras que el futuro ministro de Hacienda, Felipe Larraín, aseguró que la decisión aún no está tomada.

www.udi.cl

Nada bien cayeron los dichos de los futuros ministros de Economía y Hacienda, Juan Andrés Fontaine y Felipe Larraín, respectivamente, en relación a no intervenir en el alza de 55 pesos por litro de bencina que se producirá a partir del 25 de marzo, cuando ya quede sin efecto la medida que rebajó el impuesto específico a los combustibles de 6 a 4,5 UTM por metro cúbico durante dos años, como parte de las medidas anticrisis del Gobierno de la presidenta Bachelet.

Esto luego que diferentes personeros de la Alianza manifestaran la necesidad de mantener la rebaja impositiva para no perjudicar a la pequeña y mediana empresa, de hecho, el diputado Felipe Salaberry ya conversó con el futuro ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine, por este tema.

Así lo adelantó el senador y secretario general de la UDI, Victor Pérez, quien además aseguró que es necesario llegar a un acuerdo con las nuevas autoridades que permita también mantener el equilibrio fiscal.

Para el diputado de la UDI Claudio Alvarado, quien forma parte de la comisión de Hacienda de la Cámara, de subir el impuesto, la responsabilidad recae en la Concertación.

Una opinión más radical mostró el diputado de RN y miembro de las comisiones de Hacienda y Economía de la Cámara, René Aedo, quien planteó que los ingresos del impuesto a los combustibles están considerados en el presupuesto, por lo que sería prematuro realizar algún cambio tributario.

Mientras que el futuro ministro de Hacienda, Felipe Larraìn, aseguró en entrevista con La Radio, que aún no hay una decisión tomada en relación a la mantención del impuesto a los combustibles.

Más tarde el secretario de Estado designado se mostró abierto a dialogar el asunto con los parlamentarios y los partidos políticos.