Las indagatorias de la justicia golpean fuerte al cuestionado senador demócrata cristiano Jorge Pizarro y a sus hijos, quienes han estado en la mira del Ministerio Público, debido a su relación con SQM a través de la empresa familiar Ventus Consulting.

Según publica El Mostrador, fiscalía reunió a un grupo de analistas para que revisaran el dinero que circuló por la empresa de Jorge, Sebastián y Benjamín Pizarro Cristi, la cual registró movimiento sólo en los años 2011 y 2012, mismo periodo en que además se realizaron las polémicas asesorías verbales a SQM, y en que se preparaba la campaña senatorial de Jorge Pizarro padre.

Uno de los detalles que llama la atención del análisis, y que sugiere que Ventus Consulting pudo ser una ‘empresa de papel’ para recabar dinero para la campaña de Pizarro,, tal como ha acusado la organización querellante Ciudadano Inteligente, es que sólo se registraron pagos por parte de SQM y de Usalink, y de hecho ésta última sólo registra un documento por $1.250.000.

Es más, la empresa que facturó 45 millones de pesos a la minera no metálica de Julio Ponce Lerou, por trabajos que no pudieron ser comprobados y que tuvieron que ser rectificados por SQM, no tenía lugar físico de funcionamiento, al igual como sucedía con Asesorías y Negocios SPA de Giorgio Martelli.

El análisis hecho por el medio electrónico también detalla que en 2011 Ventus sólo declaró 25 millones de pesos de los $27.000.000 que recibió, y en 2012 sólo 9 millones de los $18.000.000, cifras que fueron enviadas al SII pero que, debido la crisis del servicio, salida de sus principales miembros y ya acostumbrada lentitud para ejercer acciones contra personajes políticos, no ha actuado en torno a una eventual solicitud de investigación formal contra la consultora.

Si bien Ventus habría rectificado estos pagos, no se tiene claridad de los trabajos realizados por la consultora, que podría o no ser investigada a fondo en un futuro cercano, dependiendo del camino que tome el nuevo fiscal nacional que sea elegido por la presidenta Michelle Bachelet y por el Senado, donde precisamente Pizarro tendrá participación e influencia, ya que no quiso abstenerse de ser parte en el proceso para elegir al nuevo persecutor en jefe.

Lee más detalles de este caso en el análisis publicado por El Mostrador.