Indignadas se encuentran las apoderadas del Colegio Instituto del Pacífico de Puerto Montt luego que sus hijas recibieran la vacuna contra el papiloma humano sin su consentimiento. Las afectadas no descartan iniciar acciones judiciales.

La molestia se debería a que se llevó a cabo la vacunación pese a que habían dejado por escrito su rechazo al procedimiento.

Las apoderadas afectadas indicaron que se vulneraron sus derechos, ya que la enfermera que lideró el equipo de salud que concurrió al establecimiento, hizo caso omiso de su posición frente a la inoculación.

En tanto, el director del colegio Instituto del Pacífico de Puerto Montt, Juan Jorquera, aseguró que cumplieron con el protocolo establecido entregando la información oportunamente al equipo de salud que concurrió al establecimiento educacional a realizar el procedimiento.

Por su parte el director del Cesfam Padre Hurtado, Miguel Aravena, aclaró que la inyeción contra el papiloma humano es obligatoria de acuerdo a la normativa sanitaria.

Las apoderadas afectadas se encuentran evaluando iniciar acciones legales en contra del consultorio de salud municipal Padre Hurtado, recinto donde desempeña sus funciones el personal que concurrió al establecimiento a realizar el procedimiento, o contra quienes resulten responsables,