La coalición árabe liderada por Arabia Saudita decretó este sábado una tregua unilateral de cinco días en sus ataques contra los rebeldes en Yemen para permitir el acceso de ayuda humanitaria.

La tregua debe comenzar el lunes a las 00H00 hora de Yemen (21H00 GMT del domingo), pero la coalición se reserva el derecho de responder a toda “actividad o movimiento militar” de los rebeldes chiitas hutíes durante el alto el fuego, según el texto, citado por la agencia oficial saudí SPA.

El texto precisa que la decisión fue tomada a petición del presidente Abd Rabo Mansur Hadi, refugiado en Riad con buena parte de su gobierno.

El jefe de Estado yemení, cuyos fieles consiguieron recuperar de manos de los rebeldes chiitas hutíes la gran ciudad sureña de Adén tras cuatro meses de guerra, solicitó esta tregua para “trasladar y distribuir en el país el máximo de ayuda humanitaria y médica”.

Otras treguas anteriores negociadas por Naciones Unidas no consiguieron mantenerse, pues las partes beligerantes no cesaron los combates.

Anteriormente, fuentes médicas habían informado este sábado de que al menos 35 civiles habían muerto, entre ellos niños, y decenas habían resultado heridos en Mokhba, en el suroeste de Yemen, en un ataque aéreo de la coalición.

El ataque del viernes golpeó un barrio residencial donde viven los empleados de la planta eléctrica de la ciudad, según los habitantes, que explicaron que muchas viviendas quedaron destruidas y que había decenas de heridos.

Según algunos testigos, los hutíes habían ocupado posiciones en la zona bombardeada.

Riad tomó en marzo las riendas de una coalición árabe para impedir que los rebeldes hutíes se hicieran con el control de todo Yemen, tras conquistar la capital, Saná, y amplias regiones del país.

La aviación de la coalición había llevado a cabo nuevos ataques el viernes y el sábado contra posiciones hutíes en diferentes regiones de Yemen, incluyendo en los alrededores de Adén.

Víctimas civiles

Más de 3.640 personas, la mitad de ellas civiles, murieron en Yemen desde el inicio de la campaña de bombardeos en marzo, según la ONU.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) alertó el viernes sobre el sufrimiento de los civiles en el país, que ha alcanzado “niveles sin precedentes”, según el responsable de la organización en Yemen, Antoine Grand.

La organización indicó, además, que la creciente violencia en el sur está paralizando la asistencia médica de urgencia.

La situación es especialmente preocupante en las provincias meridionales de Taez y Adén, donde se están intensificando los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes, según el CICR.

En Adén y en Taez, “nos está resultando cada vez más difícil acceder a las zonas afectadas, evacuar a los fallecidos y a los heridos e intervenir para salvar vidas”, añadió Grand.

El CICR volvió a instar a los combatientes a dejar trabajar a las organizaciones humanitarias.

El aeropuerto internacional de Adén, que estuvo meses cerrado, reabrió esta semana después de que las tropas de Hadi retomaran la segunda ciudad del país.

Desde entonces han aterrizado cuatro aviones con material humanitario en el aeropuerto, que sufrió un ataque de los rebeldes el pasado jueves, mientras un avión saudita descargaba su contenido.

La Cruz Roja recordó que, mientras aumentan los combates, también lo hacen “la escasez en agua, comida y carburante en todo el país”.