Puertos de todo el país, faenas mineras y forestales paralizarán este martes sus actividades, en demanda de perfeccionamientos al proyecto de ley de reforma laboral. Desde el Gobierno aseguraron que la movilización nacional, que es apoyada por la Central Unitaria de Trabajadores, “no tiene mucho sentido”.

Todos los puertos del país, salvo Mejillones, Coquimbo y Valparaíso, gran parte de las faenas mineras y forestales y un número importante de los trabajadores del comercio y la construcción paralizarán este martes sus actividades, en la primera movilización nacional convocada por el movimiento sindical desde que se inició el debate de la reforma laboral.

El paro es convocado por la Confederación de Trabajadores del Cobre, el Sindicato Nacional de la Construcción, la Unión Portuaria de Chile, la Federación de Trabajadores Forestales y sindicatos del comercio y servicios. Además, es respaldada por la Central Unitaria de Trabajadores, la CUT.

Si bien los convocantes valoran parte del proyecto del Ejecutivo, exigen algunos cambios, como incorporar la negociación colectiva interempresa, establecer un piso mínimo con IPC, corregir el funcionamiento de servicios mínimos en la huelga y eliminar los pactos de adaptabilidad laboral.

Junto con demandar el perfeccionamiento del proyecto laboral, los convocantes al paro nacional exigen, al Gobierno y al Congreso, desestimar el llamado del sector empresarial, a buscar un “gran acuerdo nacional” en torno a la reforma.

Desde La Moneda, el ministro vocero de Gobierno, Álvaro Elizalde, afirmó que el Ejecutivo ha escuchado los planteamientos del mundo sindical, por lo que la movilización “no tiene sentido”. La ministra del Trabajo, Javiera Blanco, en tanto, entregó una señal al movimiento sindical y afirmó que el debate de la reforma no se detendrá.

Desde el mundo sindical ya han iniciado conversaciones con senadores oficialistas, para impedir que opere la llamada “cocina del Senado” que, en este caso, modere el proyecto de reforma laboral, luego de su paso por la Cámara.