De visita en Combarbalá, región de Coquimbo, la presidenta Michelle Bachelet se refirió a las críticas que ha recibido el Ejecutivo tras el anuncio de abrir la discusión para despenalizar el aborto terapéutico en tres casos particulares.

En la instancia, la mandataria pidió una “discusión seria, profunda y madura sobre este tema” , recordando que Chile es una de las cinco naciones en el orbe donde el aborto terapéutico se encuentra penalizado.

“Una sociedad madura y democrática no tiene que tener temor a ningún tipo de debate”, sostuvo, y destacó que el Gobierno se encuentra en búsqueda de una moción parlamentaria para patrocinarla, en vez de presentar un proyecto nuevo.

“Vamos a patrocinar una moción parlamentaria, estamos analizando cuáles son las que están en este momento”, manifestó la mandataria.

Junto a ello, tras ser consultada por los emplazamientos realizados por el cardenal Ricardo Ezzati y sus reparos tanto por la reforma educacional como la propuesta por el tema del aborto, Bachelet aseguró que se deben escuchar todas las posiciones existentes y respetar las diferencias, aunque también señaló que no se debe perder de vista que las iniciativas buscan “terminar con la desigualdad de Chile”.

“Yo no sé si hay una persona que pueda decir que no es fundamental mejorar la calidad y mejorar el acceso a la educación en todos sus niveles”, dijo la jefa de Estado.