Bajo circunstancias que aún se investigan, murió apuñalado un menor de siete años en la comuna de Padre Hurtado. Al momento del homicidio, la víctima se encontraba con su primo de 8 años, quien salió a pedir auxilio, ya que en ese momento, la tía que los cuidaba había salido a comprar.
El escalofriante asesinato fue descubierto por Carabineros de la zona, luego de que la tía del menor fallecido denunciara la muerte de su sobrino en su hogar, ubicado en la calle Jesuitas de la villa Chiloé.
Todo comenzó cuando la tía salió a comprar a sólo dos cuadras de su casa, dejando solos a los dos menores. A los pocos minutos, el niño de ocho años, salió corriendo del hogar en búsqueda de ayuda, ya que su primo se encontraba desangrado.
Jessica, una de las vecinas del sector, fue testigo en el estado en que se encontraba el menor pidiendo auxilio. Su polera estaba empapada de sangre, al igual que su rostro y tiritaba sin parar.
Según la mujer, el niño sólo quería ayuda para salvar la vida de su primo, quien falleció por una anemia, producto de los múltiples cortes.
Tras visualizar el evidente estado de shock del menor, funcionarios del Servicio de Atención Primaria de Urgencia, SAPU, decidieron trasladarlo al centro asistencial, mientras su tía se percató del horrendo crimen del que fue víctima su sobrino de siete años.
Carabineros realizó el primer empadronamiento para trabajar en el sitio del suceso.
El teniente coronel, Fernando Beltrán, de la Prefectura Costa, afirmó que la mujer contó que su sobrino – quien es el único testigo presencial del homicidio- había acusado un robo en el hogar, donde los asaltantes habrían matado a su primo.
Hasta la tenencia Santa Rosa de Chena, de la comuna de Padre Hurtado, llegaron parientes y vecinos de la víctima. Consternados, no entendían lo que sucedía, ni las versiones cruzadas que comenzaron a surgir a medida que transcurrían los minutos.
Pedro Lizama, tío de ambos menores, contó que su sobrino se habría salvado de no morir porque se escondió debajo de la cama al momento del supuesto homicidio causado por asaltantes.
Sin embargo, esa última tesis fue perdiendo fuerza. La Brigada de Homicidios de la PDI llegó hasta el lugar para realizar los peritajes que esclarecerían si la muerte del menor fue causada por personas externas a la familia o de lo contrario, por su primo.
El jefe de la BH, subprefecto Víctor Arriagada, precisó que el cuerpo del menor fallecido presentaba múltiples heridas corto penetrantes en la región toráxica anterior y posterior. Además, un corte en el cuello y lesiones en su cuero cabelludo y rostro.
Respecto a las hipótesis que se investigan en este hecho policial, Arriagada aseveró que no se descarta la participación directa del primo del menor fallecido como presunto autor del crimen, enfatizando que hasta ese momento no se encontraron antecedentes que pudiesen confirmar un asalto a la vivienda en la que se encontraban los niños.
La fiscal adjunto de la Fiscalía local de Talagante, María Teresa Herrera, se limitó a indagar algunas de las hipótesis que hasta el momento se investigan y sólo enfatizo en que el testigo principal del hecho se encuentra custodiado por los policías, en compañía de su madre, para que luego pueda ser interrogado por personal especializado.
Dentro de las próximas horas, la Policía de Investigaciones entregará la versión oficial respecto al tema. En tanto, el cuerpo del menor fallecido fue trasladado al Servicio Médico Legal.
