Imagen: El Alma de Cayucupil

Imagen: El Alma de Cayucupil

Una horrenda imagen es la que está dejando el antiguo camino que conducía a la ruta P-560 hacia el Puente Caillín, cuando aún era de madera, y que antiguamente conformaba los “Puentes Mellizos”.

La carretera construida en 2005 entre Cayucupil y Cañete obligo a realizar un trazado distinto del Puente Caillín, emplazándolo esta vez a unos metros al sur de donde estaba el antiguo evitando así una serie de peligrosas curvas. El puente de madera ubicado en el lugar fue retirado en 2006, pero no fue cerrado el camino y puesto que aún esta transitable por la carpeta asfáltica dejada por un tratamiento anterior presenta buenas condiciones de acceso, indicó El Alma de Cayucupil.

Hoy sacos de papa, desechos de constructoras, neumáticos, etc., son algunos de los elementos que son botados en este sector. Un hedor que se siente a metros es el primer indicio que se está en presencia de estas lamentables escenas de nuestras carreteras chilenas. También muchas personas lavan sus vehiculos en el lugar botando al río los restos de detergentes.

El llamado es a denunciar a los inescrupulosos que son sorprendidos al fono de Carabineros de Cañete, pues constituye una falta que arriesga una sanción económica importante y así subsanar este problema, justo cuando a menos de 150 metros se encuentran una serie de viviendas. Asimismo llamar la atención de las autoridades locales para poder cerrar el perímetro del lugar para evitar propagar este hecho.