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El Centro de Predicción Climática de la NOAA confirmó que La Niña persistirá hasta febrero-abril de 2025 con una probabilidad del 59%, afectando el clima global, incluido Chile. Este fenómeno climático trae menos lluvias al centro y sur chileno y temperaturas más frías, aunque el episodio actual se considera débil, lo que puede moderar sus impactos. Se espera que La Niña se mantenga en verano y otoño del hemisferio sur, con una transición a un estado neutral entre marzo y mayo de 2025. Las autoridades recomiendan medidas preventivas, como la gestión eficiente del agua y el monitoreo climático para planificar actividades como la agricultura. Es importante considerar que los impactos específicos pueden variar según otros factores climáticos locales y globales.

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El Centro de Predicción Climática de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés) confirmó que las condiciones de La Niña ya están presentes.

Según los expertos del organismo, este fenómeno climático tiene efectos importantes en el clima global y, en particular, en regiones como Chile.

¿Qué es La Niña y qué significa para el clima en Chile?

La Niña es un fenómeno climático que ocurre cuando las aguas del océano Pacífico, cerca de la línea del Ecuador, se enfrían más de lo normal. Este cambio afecta los vientos, las lluvias y las temperaturas en diferentes partes del mundo.

“Durante los episodios de La Niña, los vientos alisios son incluso más fuertes de lo habitual y empujan más agua cálida hacia Asia. En la costa oeste de las Américas, aumentan las surgencias, que llevan a la superficie agua fría y rica en nutrientes”, explican desde el NOAA.

En el caso de Chile, La Niña suele traer menos lluvias en la zona central y sur, mientras que el norte puede tener un pequeño aumento de precipitaciones. Sin embargo, sus efectos dependen de muchos otros factores, y no siempre son iguales cada vez que ocurre.

En ese sentido, las condiciones de La Niña suelen asociarse con sequías en las zonas centro y sur del país. Además, suele traer consigo temperaturas más frías de lo normal. Como recordatorio, las sequías más extremas del último siglo fueron en 1924, 1968, 1998 y 2019, las que coincidieron con eventos de La Niña

No obstante, el actual episodio de La Niña se describe como débil, lo que podría moderar sus impactos típicos. Según los pronósticos del NOAA, es menos probable que este evento cause efectos severos en comparación con episodios de mayor intensidad.

¿Hasta cuándo estará presente La Niña?

De acuerdo con el informe de la NOAA, se espera que La Niña persista durante el verano y el otoño del hemisferio sur, con una probabilidad del 59% de que las condiciones se mantengan hasta febrero-abril de 2025. Posteriormente, hay un 60% de probabilidad de que el sistema transite hacia un estado neutral (ENSO-neutral) entre marzo y mayo de 2025.

Los expertos señalan que la transición hacia el estado neutral reducirá la influencia directa de La Niña en los patrones climáticos globales, aunque los efectos residuales podrían sentirse durante algunos meses más.

Nota importante: Si bien La Niña tiene patrones generales de comportamiento, sus impactos específicos pueden variar dependiendo de otros factores climáticos locales y globales en desarrollo.