Muchas madres primerizas suelen alertarse al momento de amamantar y ver que el alimento para sus bebés se sale del blanco que todos conocen. Sin embargo, estos tonos diferentes no significarían un peligro.

“Nadie me dijo que cada vez que tenía un bebé, si elegía amamantar, mi leche vendría en una variedad de colores”, comenta Jo Johnson Overby, una madre primeriza, en un video de TikTok visto por más de dos millones de personas.

“Prueba A. El color que esperas, ¿verdad?” dice en el video mientras sostenía una bolsa con leche materna blanca.

Sin embargo, al momento de mostrar la “Prueba B”, bromeó con el color de su muestra, describiéndola como “leche de frutilla”. “¿Por qué es rosa?”, preguntó la madre antes de responder: “Es sangre. Pero el bebé puede beberla, depende de ti si se lo das o no”.

@jojohnsonoverby

Strawberry milk brought to you by an aggressive clog 🥲 #newmom #breastfeeding #pumping

♬ original sound – Jo Johnson

Y es que muchas personas desconocen esta realidad de colores en la leche materna, porque no se suele hablar del tema hasta que, finalmente, les ocurre.

De acuerdo a Catherine Salazar, matrona de la Unidad de Neonatología de Clínica Santa María y consultora del Consejo Internacional de Examinadores de Consultores de Lactancia (IBCL en inglés), estos cambios de color en la lactancia se genera por diferentes situaciones, así como también cambia a medida que va madurando.

Es por eso que Salazar y Anita Calderón, matrona de Clínica Ciudad del Mar, explican a BiobioChile algunos de los colores más comunes cuando se amamanta.

Amarillo

Para las matronas, este es el color más común de todos.

Suele ser la primera leche, también conocida como el calostro. Contiene más proteínas y betacarotenos, pero menos grasa”, explica Salazar.

Esta posee un tono amarillo fuerte, casi como “oro”, según describen las profesionales.

“No hay que pensar que es un color malo, o que tiene algún problema”, menciona Calderón. “Hay muchas mamás que piensan que el color amarillo es porque tiene más grasa y que el transparente es una leche, digamos, sin grasa pero no es así”, asevera.

Plomo o azulado

Según Calderón, este color siempre alerta a las personas.

“Ese color es completamente normal. A veces se produce cuando uno guarda la leche en el refrigerador y cambia de color. Pero no hay que asustarse de ese proceso”, puntualiza.

Blanco

Este es un color que se espera o se describe como el tono “normal” o la más saludable, pero en realidad no tiene nada diferente a los otros colores.

“La leche materna siempre es saludable, independiente de su color. Que sea blanca no significa que sea mejor que otra que varíe el color”, puntualiza la consultora de la IBCL.

“Tenemos que pensar que esto lo vamos a ver cuando la leche se está extrayendo”, puntualiza Calderón.

“Normalmente la primera parte, en la etapa donde el bebé está succionando, la leche sale más transparente porque sale con más contenido de agua, más traslucida y al final de la toma se ve más blanca”, explica.

Rosa

Tal como la madre Tiktoker habló en su video, esto suele ser sangre en el alimento para el bebé.

Esto se puede deber a diferentes motivos: cuando hay microagresiones dentro del conducto y, si no hay grietas o heridas visibles, puede ser una condición benigna que se produce por la vascularización de los conductos internos cuando se va generando el calostro o la leche.

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Otro caso sobre la liberación de sangre en la leche puede ser por mastitis, una infección mamaria que viene acompañada por dolor y enrojecimiento del seno.

De todas formas, hay un tercer motivo del color de “leche de fresas”: la alimentación.

“Cuando las mamás han consumido betarragas y ese tipo de alimentos naturales que tiñen mucho, esos colores suelen pasar a la leche y puede provocar una leve coloración rosada”, explica Calderón.

De acuerdo a la profesional, esto también puede pasar con el color verde, que surge cuando las madres consumen muchos alimentos de aquel color, tiñendo la grasa de la leche.

“Esta leche no debe ser eliminada. Se debe dar igual, ya que no produce ningún problema para el bebé, ni una enfermedad para la madre. Es benigno y más común de lo que pensamos”, puntualiza Salazar.

¿Existen colores malos?

Sólo en el caso de un absceso o mastitis, donde se compruebe que la leche salga con pus, esta debe ser suspendida. De lo contrario, no existe indicación para suspender la lactancia sólo porque el color cambió.

“La leche materna siempre será saludable”, puntualizaron las especialistas.