Un conocido local de Concepción fue fiscalizado por la Seremi de Salud durante este fin de semana, tras una denuncia que indicaba que en la carne de un sándwich había un microchip de los que se utilizan para identificar a mascotas. En los próximos días se deberían conocer los resultados de esos análisis.

Personal de la Seremi de Salud de Concepción acudió a fiscalizar el conocido local de comida Manhattan, ubicado a un costado de la Vega Monumental. Como estaba cerrado, inspeccionó la fábrica de alimentos.

Lo anterior, porque se recibió una denuncia que indicaba que en la carne de un sándwich había un microchip de los que se utilizan para identificar a mascotas.

La autoridad sanitaria recibió la acusación mediante el sistema online OIRS (Oficina de Información, Reclamos y Sugerencias) del Ministerio de Salud.

chip de mascota en sandwich
Cedida a RBB

El titular de la cartera en el Bío Bío, Eduardo Barra, explicó que a través de la Unidad de Seguridad Alimentaria llegaron a visitar el local pero éste estaba cerrado.

Por ello determinaron inspeccionar la fábrica de alimentos, donde primeramente no se encontraron incumplimientos.

Se tomaron muestras para corroborar si en los productos existe o no presencia de materias extrañas. En los próximos días se deberían conocer los resultados de esos análisis.

La denuncia que recibió la Seremi de Salud fue inmediatamente revisada considerando como antecedente lo que sucedió el mes pasado en Santiago.

En esa oportunidad la concejala de la Municipalidad de Estación Central, Michelle Tabilo, notificó que una vecina de la comuna se tragó un microchip al comer un anticucho en la calle, lo que habría afectado a su salud.

La situación incluso se conversó durante el concejo municipal del martes 5 de abril.

“Fueron a la fábrica y encontraron todo en orden”

BioBioChile conversó con el dueño del local Manhattan, Ricardo Denevi, quien no emitió comentarios ni en contra ni a favor de esta situación, hasta no recibir los resultados sanitarios.

“Yo estoy súper tranquilo y ya me fueron a revisar y me encontraron todo en óptimas condiciones, tanto en el local, primero fueron al local estaba cerrado, después fueron a la fábrica y encontraron todo en orden”, precisó Denevi.

A esto agregó que “aquí hay dos cosas, que la denuncia sea verídica y que efectivamente el chip sea del animal que yo trabajo o que alguien maliciosamente me haya puesto de otro animal (…) Cada vez que me fiscalizan yo me saco 100 puntos”.

“Aquí lo que vale es lo que sanidad va a decir (…) aquí la palabra la tiene el Servicio de Salud, ellos tienen que dar el resultado. Y con ese resultado que vea la gente, eso es creíble para ellos”, manifestó el dueño de este local que tiene una larga trayectoria en la zona.