La Contraloría de la República emitió un informe que involucra al Centro de Salud Familiar Manuel Lucero de Olmué, en el cual se acusa a ocho médicos, que ejercían su labor en 2016, por incumplimiento de horas y ausencias injustificadas.

A partir esto, el ente contralor ordenó al municipio realizar descuentos millonarios, además de exigir la devolución del pago de las horas no trabajadas que no fueron justificadas.

Los funcionarios se reunieron con dirigentes del Colegio Médico de Valparaíso, quienes indicaron que las acusaciones son erróneas y que se debe a una negligencia del municipio, ya que, según manifestaron, la información del personal del CESFAM no fue ingresada oportunamente.

El presidente del Colegio Médico de la región, Juan Eurolo, manifestó su apoyo a los profesionales cuestionados, adelantando que judicializarán este caso. Además, dijo que no permitirán que se recaiga en este tipo de irregularidades por lo que se “perseguirá” a los responsables.

Los médicos acusados arriesgan sanciones que pueden llegar a la destitución de sus cargos, además de la imposibilidad de ejercer en el sistema público por al menos cinco años.

La Radio se contactó con el Municipio de Olmué, pero descartaron referirse al tema por el momento.