No se puede descartar por completo la participación de terceros en la muerte del académico británico. Sin embargo, según indicó el fiscal regional Adrián Vega, la probabilidad es “muy baja”. Se mantiene la hipótesis de un extravío con desenlace fatal por las características del terreno.

Este jueves, personal del GOPE de Coquimbo encontró el cuerpo sin vida del astrónomo británico Tom Marsh (61), desaparecido el 16 de septiembre. Tras las primeras pericias, la data de muerte preliminar arrojó que se habría accidentado en una caminata.

En concreto, el hallazgo del cadáver fue confirmado por Carabineros de Chile pasadas las 12:30 horas, poniendo fin a 56 días de una extensa y ardua búsqueda.

El caso acaparó la mirada de la opinión pública a nivel nacional e internacional. Durante el tramo final, la búsqueda contó con la presencia de la esposa del científico y dos de sus hijos en terreno, quienes arribaron hace pocos días al país.

El cuerpo se encontró a 5 kilómetros de distancia del observatorio del ESO – European Organisation for Astronomical según sus siglas en inglés -, en los mismos terrenos de La Silla, comuna de La Higuera.

Desde la organización del observatorio también colaboraron con el rastreo en el complejo suelo donde se emplaza el centro de observación astronómica.

La zona está dentro del “sitio de interés” abordado por las indagaciones que desarrolló la Fiscalía Regional de Coquimbo, con base en las evidencias encontradas en los paños durante las ocho semanas en que se extendieron las labores.

Investigación preliminar: desaparición de Tom Marsh

Según se presume de manera preliminar en la investigación, liderada por el fiscal regional Adrián Vega, Tom Marsh habría dejado su habitación del hotel del observatorio en la mañana. Durante el camino al telescopio, pudo haber tomado uno de los senderos a un costado del cerro La Silla, donde se habría perdido.

Desde el punto en que se hallaron sus primeras pertenencias al aire libre, el rastreo avanzó por caminos de difícil acceso. Se encontraron otros elementos que el astrónomo dejó caer en su caminata, como ropa y una botella de agua, según los antecedentes de la investigación.

Posteriormente, los objetos fueron enviados a análisis de laboratorio, donde se confirmó que correspondían al científico.

Ruta de búsqueda y prórroga del rastreo

En el último lugar donde se encontraron evidencias, a 3,5 kilómetros del observatorio, se fijaron áreas específicas y una posible ruta en dirección a Punta Colorada. De esta manera, se peinó la zona para dar con nuevos indicios y la persona extraviada.

En un principio, el fiscal Vega había ampliado el trabajo hasta el 30 de octubre, solicitando nuevos medios, entre personal fronterizo del Ejército y unidades especializadas de Bomberos de Chile.

Sin embargo, ante la falta de resultados y con nuevos recursos solicitados por Vega, se anunció una nueva prórroga del rastreo hasta la primera quincena de noviembre. Esto, con la esperanza de abarcar todo el terreno que faltaba por recorrer y dar con el paradero del académico de Warwick.

Muerte de Tom Marsh: hallazgo e hipótesis

Luego de confirmarse la noticia, pasaron horas hasta poder conocer los primeros antecedentes del hallazgo del astrónomo. Pasadas las 17:00 horas, se continuaba con las labores de rescate. El cuerpo se encontraba en un lugar de difícil acceso, por lo que requirió de elementos como cuerdas para poder retirarlo.

Llegada la noche, las autoridades realizaron un punto de prensa desde el campamento en el sitio para dar cuenta de las informaciones preliminares, tras los exámenes externos que ahora deberán ser contrastados con peritajes y análisis profundos. Esto, con el fin de determinar con mayor certeza lo sucedido.

La causa de muerte y eventual participación de terceros deberá ser ratificada por los exámenes del Servicio Médico Legal (SML). Sin embargo, la principal hipótesis de la Fiscalía y la PDI es que Tom Marsh sufrió un accidente en medio de su caminata por los senderos y cerros de La Silla.

“Es una zona muy escarpada, en la cual para poder bajar por los cerros hay que pasar por sectores muy rocosos y, efectivamente, cualquiera puede torcerse el tobillo y caer. Esa es una de las hipótesis de trabajo, que debe ser confirmada por los exámenes forenses”, expuso Vega.

Complejidad del terreno: búsqueda en la zona por segunda vez

Según conversaciones del medio El Día con personas involucradas en la búsqueda, comentan que no se trata de un camino en línea recta, sino que se considera pendientes y desniveles a sortear.

Además, por la extensión y características del terreno, es fácil perder la orientación si se pierde un punto de referencia, como el observatorio. Inclusive, señalaron que – en medio de las labores de búsqueda – un equipo de rescatistas de alta montaña caminó por más de seis horas un noche y no pudieron regresar al campamento.

En ese contexto, se permite tener una mejor referencia del punto en que fue encontrado Tom Marsh, a 5 kilómetros del observatorio.

Cabe recordar que, las evidencias de su paso habían sido encontradas entre 1,5 y 3,5 kilómetros.

Según lo señalado por el fiscal regional, “todos los alrededores de La Silla habían sido rastreados hasta 5 y 8 kilómetros a la redonda y ese trabajo se estaba volviendo a hacer. Esto, porque por las características del terreno, era probable que podía no haberse visto desde algún ángulo, porque era un sector rocoso y hay que estar en un preciso ángulo para poder observar”.

Investigaciones: data y causa de muerte

El fiscal Adrián Vega, destacó el hecho de “poder darle tranquilidad a la familia” con este hallazgo, tras meses de incertidumbre por el paradero del británico.

“La investigación continúa con todos los exámenes de rigor para definir todos los contornos del caso”, indicó Vega.

El fiscal no estimó una data de muerte. No obstante, los análisis de peritos permiten tener un período estimativo que sería de 55 días.

Ante este escenario, la búsqueda duró 56 días, por lo que la muerte de Marsh habría sido temprana tras su desaparición.

Para determinar este y otros datos de importancia, como la causa de muerte, el cuerpo fue enviado al SML de la región Metropolitana, donde se espera avanzar con mayor rapidez en los exámenes pertinentes. Esto, en paralelo a la investigación que lleva adelante la Brigada de Homicidios de la PDI La Serena.

De este modo, el fiscal explicó que en Santiago será más rápido y oportuno acceder a todas las posibilidades de especialistas, exámenes y análisis de laboratorios más específicos, que comúnmente retrasan las indagatorias en regiones.

“De todas maneras se iban a tener que realizar y se prefiere hacer ‘in situ’, para los efectos de que sea más preciso y la familia pronto pueda efectuar todos los trámites de rigor”, agregó.

Silencio de la familia de Tom Marsh

Este jueves se cumplieron 12 días desde que Felicity Marsh, esposa de Thomas, y dos de sus hijos llegaron a los terrenos de La Silla para seguir en primera persona los detalles de la búsqueda.

Anterior a ese momento, la familia había estado al tanto del caso en contacto directo con el fiscal regional, pero desde Inglaterra.

Días antes de llegar, publicaron la que ha sido su única declaración. Esto, fuera de los tweets que tanto Felicity como su hija Tabitha habían publicado para difundir la noticia de la desaparición del científico.

En la oportunidad, agradecieron las muestras de apoyo y dieron sentidas palabras a Tom Marsh, a la espera de tener novedades.

Por otro lado, tenían planeado viajar de vuelta a Santiago la madrugada de este viernes. Sin embargo, de un momento a otro recibieron la noticia del hallazgo de parte del fiscal Adrián Vega.

Finalmente, hasta el cierre de esta nota la familia del astrónomo británico no ha vuelto a hacer nuevas declaraciones en redes sociales, desconociéndose los pasos que seguirán.