La noche del martes, el Hotel Costa Real de La Serena fue incendiado, saqueado y destruido por una turba de encapuchados, incidente en el cual Bomberos incluso debió rescatar a algunos huéspedes.

Tras el ataque, y en conversación con Diario El Día, uno de los dueños del recinto dijo estar de acuerdo con que militares vuelvan a las calles ya que, de no ocurrir, la actual crisis podría terminar en una guerra civil.

“Totalmente de acuerdo (salida de militares a las calles). Yo viví el año 1973 y aquí el 90% de la gente que habla de la dictadura no sabe. Aquí hace falta mano dura y si no la hay este país se terminará. Imagínese que el trabajo de 40 años se vio en el piso de un día para otro”, indicó Iskandar Buale al citado medio.

“Hace 20 años que abrimos el hotel con crédito bancario, hemos pagado el 70% de la deuda y todavía nos quedan 10 años para terminar y en este momento no sabemos cómo, afortunadamente hay un pequeño seguro, pero eso no alcanza”, añadió.

Sobre las imágenes que dieron cuenta de la destrucción de su negocio, y que recorrieron los medios nacionales, Buale las catalogó como “estremecedoras”. “Esta empresa tiene 93 años en La Serena, es una empresa antigua, primero la lideró mi padre, luego yo y ahora mi hijo. Yo veo a la juventud sin cultura, sin educación y es lamentable”, añadió.

Sobre el actuar de Carabineros en el saqueo y posterior incendio, el empresario afirmó que llamó a la policía uniformada, la que llegó dos horas después, “pero yo los entiendo porque tienen que responder y estar en todos los lados donde hay problemas”, dijo.

“Yo aplaudo el trabajo de los Carabineros y tengo amigos que pertenecen a la institución. No sé qué decir, estoy indignado”, detalló, aunque precisó que no con las autoridades, de quienes dijo esperar que actúen rápidamente.

Con respecto al ataque que sufrió su hotel, del cual es dueño junto a sus dos hermanos y su familia, recuerda que había “más de 300 enmascarados”, los que “quemaron las habitaciones, robaron 60 televisores, 60 frigobar, quemaron todos los muebles, quebraron todos los vidrios”.

“Yo me pregunto ¿qué culpa tenemos nosotros? ¿Por qué nos hacen esa maldad a nosotros? ¿Quién los entrenó? Estoy molesto y creo que si no salen luego los militares habrá una guerra civil, estamos llenos de maleantes. Estoy seguro que esto no es casualidad, no, no puede ser, esto está organizado”, remató.