La diputada Erika Olivera, envió un proyecto de resolución solicitando al presidente Piñera y a la Junta Nacional de Auxilio Escolar (Junaeb) que se reajusten las becas de alimentación y mantención para educación superior de acuerdo al IPC.
En el escrito la parlamentaria establece que “este tipo de beneficios ha permitido a miles de familias chilenas que sus hijos sean la primera generación en ingresar a la educación superior, lo cual representa mayores y mejores oportunidades de vida”.
Junto a esto detalla que, dentro de las ayudas está la beca de mantención y la beca de alimentación, las cuales representan un gran apoyo para los estudiantes, especialmente aquellos que provienen de las familias más vulnerables.
Por un lado, la beca de mantención (BMES) equivale a 195.600 pesos anuales, divididos en 10 cuotas; y la beca de alimentación (BAES) corresponde a un aporte que asciende mensualmente a 32.000 pesos.
Según la diputada RN, la inflación también se ha traducido en un aumento en el precio de los alimentos y de otros bienes y servicios que emplean los estudiantes de manera habitual en relación a sus actividades docentes, tales como materiales u otras herramientas en carreras específicas.
“Las dos becas mencionadas no han tenido ningún tipo de variación o reajuste en sus montos desde el año 2012. A modo de ejemplo, desde ese mismo año, la beca de alimentación se mantiene en $32.000 mensuales, a pesar de que el costo de la vida ha aumentado considerablemente en los últimos años”, se detalla en el documento.
Finalmente, según la parlamentaria, en los últimos años ha existido un importante aumento en la cobertura de estas becas, ascendiendo a más de 600.000 estudiantes, lo que debería traducirse en un reajuste del monto de la beca acorde a la realidad económica actual del país.
