La mañana de este lunes comenzó la fase oral por la demanda de Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia en La Haya, que exige a Chile negociar una salida al mar con soberanía.

Con la presencia del presidente Evo Morales, los abogados que representan a ese país acusaron a Chile de invadir, causar pobreza y ahogar al pueblo boliviano, como lo expresó a modo de resumen la jurista francesa que representa a Bolivia, Monique Chemillier-Gendreau.

La fase oral comenzó a las 5:59 horas, con la intervención del presidente del tribunal internacional, el somalí Abdulqawi Ahmed Yusuf, quien informó que de los 15 jueces titulares, iban a participar 13, más los jueces ad hoc de cada país, Dolnal Mac Ro, por Chile, e Iv Dudé de Bolivia.

Minutos antes, el presidente altiplánico comenzó su ofensiva a través de Twitter, donde aseguró que “Antofagasta fue, es y será territorio boliviano”. Acto seguido, unas horas más tarde replicó esos dichos el presidente Piñera, quien recalcó que “una vez más se equivoca el Presidente Morales, ya que de acuerdo al tratado de 1904, Antofagasta ha sido, es y seguirá siendo chilena”.

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Fue el agente de Bolivia el encargado de abrir los alegatos, Eduardo Rodríguez Veltzé, quien sorprendió al reconocer lo dispuesto por la CIJ en septiembre de 2015, cuando rechazó las pretensiones chilenas de que el tribunal se inhabilitara para resolver la demanda. En esa oportunidad, los jueces determinaron que no pueden resolver una salida al mar con soberanía para Bolivia.

Tras los alegatos de cuatro de los abogados extranjeros de Bolivia, Payam Akhavan, Monique Chemillier-Gendreau, Antonio Remiro Brotons y Vaughan Lowe, el canciller chileno, Roberto Ampuero, cuestionó la interpretación histórica realizada por el país altiplánico.

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En concreto, los acusó de tergiversar la historia, victimizarse y no recordar que fue Bolivia la que generó la Guerra del Pacífico al ordenar la expulsión de los chilenos y la incautación de sus bienes en los territorios en disputa.

Durante la jornada, el presidente Evo Morales se sentó en primera fila frente al estrado de los jueces de la CIJ. Eso sí, no hizo declaraciones en el palacio de la Paz y se retiró raudo de ese lugar sin hablar con la prensa.

Pero sí lo hizo luego en el hotel Crowne Plaza, donde aloja con su delegación. De hecho, aceptó tres preguntas: dos de periodistas chilenos y una de un connacional.

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Ahí acusó que hay sectores en Chile que los humillan y de paso rechazó las acusaciones del canciller sobre tergiversar los hechos ante la CIJ. “En Chile qué me dicen algunos: indio sin plumas”, acusó.

Quien salió a poner paños fríos fue el expresidente de Bolivia, Carlos Mesa, que explicó que la emoción los invade a la hora de defender sus intereses.

En ese contexto, mañana a las 6:00 horas continúan los alegatos de la representación de Bolivia. Evo Morales abandonará La Haya en horas de esa misma tarde, tras abordar su avión desde la loza del aeropuerto de Rotterdam, la ciudad más cercana.

Así coronará una ruidosa visita que tampoco pasó desapercibida en Holanda. Pese a que la prensa de ese país no hizo mayor eco cuando Chile se enfrentó a Perú en la misma Corte, en esta ocasión la campaña comunicacional de Morales tuvo resultado en uno de los principales diarios de los Países Bajos, el de Volkskrant, que en esta ocasión sí destacó el tema y tituló: “En La Haya combaten por el trauma nacional de Bolivia: el Océano Pacífico”.

En tanto, Chile comenzará su exposición el jueves, en dos jornadas de tres horas cada una.