Colonial Pipeline, uno de los principales operadores de oleoductos de Estados Unidos, tuvo que suspender todas sus operaciones el viernes tras sufrir un ciberataque, indicó la compañía que transporta diesel y gasolina por más de 8.800 km de tuberías en el país.

“El 7 de mayo la compañía Colonial Pipeline supo que estaba siendo víctima de un ataque de ciberseguridad”, dijo la empresa en un comunicado.

Por esto, “todas las operaciones de oleoductos fueron detenidas temporalmente y algunos de nuestros sistemas informáticos se vieron afectados”, añadió.

Colonial Pipeline opera una red de oleoductos que conecta refinerías del Golfo de México con el noreste de Estados Unidos.

El grupo dijo haber contactado con una importante empresa de ciberseguridad para resolver el problema y aseguró que abrió una investigación sobre las causas del incidente.

“Contactamos a las fuerzas del orden y a otras agencias federales”, aseguró la compañía.

Colonial Pipeline es el mayor operador de oleoductos para productos refinados en Estados Unidos.

Varios ataques informáticos han afectado a Estados Unidos en los últimos meses, entre ellos el ciberataque masivo de SolarWinds, que comprometió a miles de recursos informáticos del gobierno.

La administración de Joe Biden acusó a Rusia de ese ataque y ello condujo a sanciones financieras contra Moscú, así como a la expulsión de diplomáticos.