Tras un año de investigación, el cantante urbano e influencer Max Valenzuela anunció que el proceso concluyó con la declaración de su inocencia.
El joven, que se hizo conocido en las redes sociales junto a Ignacia Antonia e ImFerv -ahora conocida como Katteyes-, publicó un comunicado donde aseguró que la denuncia siempre fue falsa y sin sustento.
“Hoy, después de un largo silencio, puedo al fin hablarles y compartir mi verdad. Hace casi tres años, unos miembros de mi familia lejana me acusaron de algo que yo jamás sería capaz de hacer. Aquella herida fue doble: me arrebató la paz y, al mismo tiempo, detuvo mi vida y mi carrera por completo. Durante todo este tiempo guardé silencio. No porque me faltaran palabras, sino porque la ley me obligaba a hacerlo. Elegí respetar el proceso, aunque me doliera, y confié en que la justicia, tarde o temprano, hablaría en mi nombre”, comenzó escribiendo.
Sobre lo mismo, el influencer continuó: “La Fiscalía investigó exhaustivamente durante más de un año. Yo estuve presente en Chile durante todo ese tiempo, colaborando en cada etapa del proceso. Mientras tanto, quienes me acusaban nunca mostraron interés en probar lo que decían. Demoraron todo el proceso legal al no entregar las pruebas que les pedían, no respondieron a los llamados de la justicia y, finalmente, su abogado no se presentó a la audiencia de cierre. Peor aún, buscaban dinero a cambio de retirar la acusación. Yo me negué“.
Al respecto, Max Valenzuela, aseguró que “no había nada que me vinculara a esos hechos, porque nunca ocurrieron”. En consecuencia, la Fiscalía cerró el caso de manera “definitiva e irrevocable”, por ende, “la justicia confirmó que mi inocencia es clara y que las acusaciones jamás tuvieron sustento”, aseveró.
Por consiguiente, ahora “mi nombre está limpio” y con ello se cierra lo que definió como un “capítulo doloroso de mi vida”. De ahora en más, el influencer dijo estar enfocado en su carrera musical: “Aún no he terminado”, concluyó.
Enviando corrección, espere un momento...
