La ex protagonista de "El mundo de Riley" filmó el clip musical dentro de un templo donde bailaba y celebraba la muerte de tres acosadores sexuales. Tras no revisar el guion del video, el sacerdote que la autorizó fue removido de sus funciones.

“Me siento mucho más ligera como una pluma contigo fuera de mi mente”, canta la ex Chica Disney, Sabrina Carpenter, en su reciente videoclip de la canción “Feather”; sin embargo, a más de un mes del estreno, el clip generó su primer coletazo.

En el registro se ve a la ex protagonista de “El mundo de Riley” siendo acosada por un trío de hombres en la calle, quienes mientras la siguen, son atropellados por un camión. Posterior a ello, las imágenes muestran como la actriz es víctima de mansplaining en un gimnasio mientras hace pesas, pero en un acto poco usual, todos los hombres del lugar terminan en una sangrienta pelea.

Por si fuera poco, en otra escena se ve a Carpenter siendo fotografiada por debajo de su falda en un ascensor por otro sujeto, el que muere luego de que la cantante atrapara su corbata en la puerta del elevador.

Sin embargo, la escena final fue la causó el conflicto mayor, esto, pues la ex Chica Disney llega hasta una iglesia donde se realiza el funeral de los sujetos, donde entre cantos y bailes termina celebrando su muerte. Todo esto mientras es uno de los ataúdes se lee “RIP Bitch” (“Descansa en paz perra”, en español).

Pese a que Carpenter fue autorizada a grabar el clip en la Parroquia de Nuestra Señora del Monte Carmelo-Anunciación del barrio de Williamsburg en Brookly, EE.UU, el sacerdote detrás del permiso fue removido de sus funciones.

Según informó el New York Times, el obispo Robert J. Brennan dijo estar “horrorizado por lo que se filmó en la Iglesia”, haciendo alusión al clip de la ex Chica Disney. Misma razón por la que el Monseñor Jamie J. Gigantiello, a cargo del templo, fue castigado por la autorización.

“La parroquia no siguió la política diocesana con respecto a la filmación en propiedad de la Iglesia, que incluye una revisión de las escenas y el guión”, argumentó Brennan respecto al castigo para Gigantiello.

Según consignó TooFab, de TMZ, posterior a la decisión, el monseñor publicó una disculpa en la cuenta de Facebook de la iglesia, donde aseguró que autorizó a Sabrina Carpenter a grabar el video con el fin de “fortalecer aún más los vínculos entre los jóvenes artistas creativos que constituyen gran parte de esta comunidad (religiosa)”.

Aunque admitió que no revisó el guión aseguró que el montaje final no reflejaba la idea que se le presentó inicialmente.