Una serie de cambios personales inició durante este 2020 la modelo Carla Ballero (41), quien ha estado alejada de redes sociales y dedicada en exclusiva a su terapia personal y su familia.

En conversación con Las Últimas Noticias, la exintegrante de Morandé con Compañía sostuvo que este proceso lo inició en mayo pasado, tiempo en el que asegura que “tocó fondo”.

“En ese período estaba mal, físicamente, mentalmente y espiritualmente. Me sentí mal y decidí hacer un cambio profundo. He sido muy valiente en tomar esta decisión de rearmarme”, indicó.

“Tuve que tener mucha fuerza. Primero inicié una terapia profunda, psicoterapia que será de por vida. Saqué muchas cosas que le hacían mal a mi vida. Dejé de trabajar en todo, estuve sin ganar ni uno. Nada de relaciones amorosas. Me fui a los 18 años de la casa materna y a los 41 volví a vivir con mis papás y mis tres hijos, pasamos casi toda la cuarentena con ellos. Retomé los horarios. Tampoco ejercito como antes, porque claro, me ocupaba de mi cuerpo, pero por dentro estaba destrozada. Y no tomo más alcohol, me hace muy mal, le hace muy mal a mi vida. No más alcohol en mi vida. Es una droga, aceptada, que te rompe”, agregó.

En este sentido, Ballero reconoció que durante los últimos años estuvo con algunos problemas de adicciones, los cuales buscó dejar atrás con terapia y desintoxicación.

“Hay que tomar la decisión sólo por uno. Llega el momento en que te das cuenta de que hay que hacerlo. Te das cuenta de que tus hijos no van a estar bien si tú estás mal. Yo tengo hijos, tengo tres niños que dependen de mí y soy buena mamá, pero necesitaba ser la mamá excelente que siempre he querido ser para ellos. Hoy somos una familia y soy parte de ellos”, señaló.

Junto con eso, la modelo habló respecto a cómo vivía su vida antes de tomar la decisión de realizar la terapia, reconociendo que tuvo problemas con el alcohol.

“Estaba perdida. Todo lo que hacía me salía mal, me había abandonado. Me faltaba el respeto a mí misma. Yo evitaba mirarme adentro y ver qué pasaba. Corría todo el día y me refugiaba en, por ejemplo, el alcohol para no mirarme. Ahora que logré entenderme, puedo perdonarme”, comentó.

Por último, Ballero contó que espera poder lograr la estabilidad necesaria para volver a trabajar . Por ahora, se mantiene en compañía de sus padres y sus hijas, con evidentes mejoras.

“Tuve un renacer. Soy una nueva persona, estoy muy orgullosa. Soy una persona con lo mejor de mí y reconozco lo bueno que tengo en mí y que no conocía. Ahora ya puedo retomar las cosas desde la tranquilidad, siento que ahora todo sale bien. Tengo todas las ganas de vivir esta vida sana y ordenada y retomar mi trabajo”, concluyó.