Desde Concepción, Jose Cid Baeza nos envía esta imagen y la siguiente descripción:
Al ver la medalla de finalista del Maratón de Santiago, en la versión del presente año, – y en comparación con las anteriores – a primera vista parece ser la más estética y la de mejor diseño. Sin embargo, faltó solo un momento de observación para catalogarla como la peor de todas.
Falta de tino, negligencia, falta de profesionalismo, exclusión y machismo. Son muchos los calificativos con lo que podemos valorar la falta de visión de género que produjo la decisión de no incluir en las medallas al género femenino.
El diseño de la medalla parece ser de los albores del 1900, época de una sociedad retrógrada, cuando las mujeres ni siquiera tenían el derecho a alzar la voz. Menos a correr por gusto.
Al ser consultados por la polémica, desde la organización de Maratón de Santiago no se quisieron referir al tema.