El móvil del crimen de un hombre de 46 años, ocurrido ayer en las cercanías del cementerio general de Concepción, fue un “piropo” lanzado por el autor del asesinato a la pareja del fallecido.
La víctima fatal, Ramón Paredes, compraba junto a su pareja en un almacén donde se encontró con el victimario, también de 46 años. En ese lugar, el homicida habría intentando galantear con la mujer, generándose un discusión.
Ambos se encontraron en la calle minutos después, con bastante alcohol de por medio, reanudándose la pelea y Paredes recibió una puñalada en el pecho.
No habían rencillas anteriores, sino que fue algo circunstancial indicó el comisario José Carmona, jefe de la Brigada de Homicidios.
Luego el autor del crimen fue alcanzado por los familiares del fallecido, quienes lo golpearon hasta que los detectives lo rescataron, al ser avisado mediante un llamado anónimo.
El detenido quedó a disposición de los tribunales y está confeso del crimen.