Como César Vargas Barrientos, de 37 años fue identificado el hombre que la mañana de este lunes recibió una fuerte descarga eléctrica, muriendo instantáneamente en un predio de la empresa láctea neozolandesa Manuka, en las cercanías del cruce San Ramón, en la comuna de Puerto Octay.
Preliminarmente se informó que el suceso fue en terreno de la ex Hacienda Rupanco, denominada actualmente como Coihueco y que es administrada por la empresa láctea neozolandesa Manuka. Sin embargo, tras el correr del día se descartó dicha relación.
El hombre se encontraba desempeñando faenas agrícolas a bordo de un tractor, percatándose que la pala de una máquina retroexcavadora, que era operada a metros de distancia, tomó contacto con cables del tendido eléctrico del sector.
En ese instante dio aviso al operario de la máquina agrícola, afirmándose en ella y recibiendo la mortal descarga eléctrica, según lo informó el jefe de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Osorno, comisario Carlos Albornoz.
El policía aclaró que los cables nunca fueron cortados y que el operario de la máquina retroexcavadora no sufrió lesiones debido a la aislación del móvil.
La investigación que comenzó al respecto buscará establecer si es que se cumplía o no la normativa de seguridad en la empresa agrícola.
En el lugar trabajó personal de la Brigada de Homicidios de la PDI de Osorno, junto al Laboratorio de Criminalística, proveniente de Puerto Montt, para establecer las causas del deceso. Posteriormente el cuerpo fue trasladado hasta el Servicio Médico Legal de Osorno, para la autopsia de rigor.
