Versiones contrapuestas marcaron la noche del martes y la madrugada del miércoles en la provincia de Osorno, luego de que las autoridades no se coordinaran para dar una respuesta certera a la comunidad tras el terremoto registrado en la zona norte, y que obligó la evacuación de todo el borde costero del territorio nacional.
En primera instancia, 600 personas fueron las evacuadas por prevención en San Juan de la Costa. De ellas, 150 corresponden a las más inmediatas al borde costero.
Conforme a los antecedentes recabados en terreno, los primeros en tomar conocimiento por medio de las alertas telefónicas fueron los mismos pescadores artesanales, Carabineros y Bomberos, quienes activaron las alertas y procedieron a la evacuación de las familias.
Luego de ocurrido ello, recién las autoridades provinciales tomaron contacto para dar las instrucciones protocolares.
Tras el retiro de las familias hasta la zona segura, algunos de ellos albergados en el internado, se congregaron en dependencias del cesfam de Bahía Mansa todos los organismos de emergencia correspondiente, incluyendo a Carabineros, Bomberos, Salud, Ejército, PDI y el municipio, para hacer un recuento de las labores efectuadas.
En ese minuto se confirmó que pescadores artesanales se habían internado en el mar este martes, y no contaban con ningún tipo de comunicación radial y telefónica para darles el aviso de que llegaran a tierra firme.
Se trataba de cinco embarcaciones con cerca de 18 pescadores que trabajaban entre Punta Gruesa y Caleta Milagros, ante lo cual se tomó la decisión de que un sexto bote zarpara para ir en su búsqueda, según lo informado por el mismo alcalde de Mar, Renato Carrillo.
Tras varias horas de tensión, los pescadores artesanales fueron arribando hasta el muelle de Bahía Mansa sin mayor novedad, dado que algunos de ellos se encontraban en la costa por lo que vecinos lograron alertarles.
Esto fue relatado por Marisol Paredes, la única mujer que se encontraba faenando cual, afirmando que ante eso determinaron internarse aproximadamente 10 millas mar adentro para esperar el tren de olas anunciado.
Conforme al catastro entregado por el mismo alcalde, la plaza total de embarcaciones de la zona corresponde a casi 60, de las cuales sólo cuatro fueron sacadas a tierra firme.
En lo que refiere a la comunidad de Pucatrihue, fueron cerca de 30 personas quienes por decisión propia determinaron pernoctar en sus autos a la altura del Puente Contaco, el cual mantenía cortado personal de Bomberos por seguridad.
A pesar de que la emergencia fue levantada cerca de las 04:00 de la madrugada, por determinación de las autoridades las clases se suspendieron en el litoral, más aún considerando que en el internado existían albergados, conforme lo explicado por el seremi de Educación, Pablo Baeza.
Cabe mencionar que el COE (Comité de Emergencia) sesionó en dos oportunidades antes de levantarse la alarma de tsunami, donde ya a las 02:30 de la madrugada se tenía la confirmación de todas las familias que fueron evacuadas y aquéllas que se negaron a salir de sus hogares, las que sin embargo finalmente fueron retiradas por Carabineros y Bomberos de los inmuebles por precaución.
Tania Lavado (RBB)
