Hace una semana el ranking FIFA determinó a los países que serán cabezas de serie de los grupos que tendrá el próximo mundial de fútbol de Brasil 2014.

Y no sólo eso. También el listado elaborado reflejó una vez más cuáles son las “peores selecciones del mundo”, en relación al desempeño que han tenido dentro de una cancha.

En ese sentido, los representativos de Bután y San Marino compartieron el último puesto -el 207- junto a las Islas Turcas y Caicos. Este último, un humilde combinado originado de las 40 islas del Caribe de territorio británico, ocho de ellas habitadas.

Al respecto, BBC Deportes realizó una particular nota al entrenador del seleccionado insular antes citado, el inglés Matthew Green, quien aseveró que el fútbol no sólo se trata de ganar.

“En pocos años hemos logrado armar un programa juvenil bastante fuerte y nuestro programa de base es muy grande”, sentenció el adiestrador, que añadió que cada vez que viaja a su tierra natal sufre las burlas de sus amigos y familia por el puesto de su equipo en el ranking.

Sin embargo, esto último no le preocupa. “Todo el mundo piensa que estoy sentado en la playa tomando piñas coladas… Me gustaría, pero hay mucho que hacer”, dijo Green, añadiendo con orgullo que “no ha sido fácil, pero (el fútbol) se ha convertido en el deporte más popular en el país en la categoría juvenil”.

Y es que para el técnico -que postuló al cargo luego de leer un aviso en el diario- los avances que ha logrado fuera del terreno de juego han sido más significativo que las derrotas dentro del mismo. “Un nuevo estadio con capacidad para 5.000 espectadores se construyó en los últimos años gracias a la financiación de la FIFA”, explicó y aseguró que podrían mejorar en el listado “si podemos conseguir algunos recursos adicionales”.

Lo anterior, ya que la selección de las Islas Turcas y Caicos prácticamente no cuenta con profesionales de la disciplina y los pocos que lo son, como Gavin Glinton, militan en ligas poco competitivas como la segunda división de Vietnam. ¿El resto del plantel? “Hay policías, abogados, profesores y trabajadores de la construcción”, contó Green.

Esto último ha sido uno de los grandes problemas del adiestrador, pues ha provocado que el equipo lleve dos años sin jugar en competiciones oficiales por la escasez de jugadores para presentarse. De hecho, el último registro que se tiene de un resultado de esta selección es una derrota global de 10 a 0 rumbo a Brasil 2014.

Pese a todo, el entrenador consignó que ya está planificando para dirigir a su combinado en las clasificatorias de la Concacaf para Rusia 2018, las que mira con absoluto optimismo. “Ahora tenemos más de 20 ligas y competiciones en todas las edades y sexos. Unos años atrás teníamos tres”, concluyó.