El Buque Factoría “Betanzos” de bandera Chilena, fue afectado por un “acorbatamiento” con sus artes de pesca, hecho ocurrido durante maniobra de faena a 100 millas náuticas de Bahía Fildes, motivo por lo cual debió ser remolcado por el Pesquero Coreano “Adventure”, que se encontraba en el área, según informó a Prensa Antártica el Gobernador Marítimo de la Antártica Chilena, Capitán Marcelo Villegas.

En este sentido, la Gobernación Marítima dispuso que el Pesquero Betanzos, quedara fondeado en Caleta Potter, Bahía Fildes, Isla Rey Jorge, debido a que es el fondeadero más seguro para una nave sin propulsión, y además, porque en esa Caleta se encuentra ubicada la Base Argentina “Carlini”, que cuenta con personal de buzos todo el año.

La nave contó con el apoyo permanente de la Gobernación Marítima de la Antártica Chilena, realizando coordinaciones con la Base Argentina “Carlini” para el empleo de personal especialista en buceo, y con la Gobernación Marítima de Punta Arenas, debido a que se encontraba activado el Centro de Búsqueda y Rescate Marítimo en fase alerta, dada la condición del Pesquero Betanzos que se encontraba sin propulsión.

Los trabajos de liberación del sistema del Betanzos, estuvieron a cargo del personal de Buzos de la Base Argentina y a contar del día miércoles 29 de mayo, apoyados por buzos Chilenos de la empresa Nautilus Sermares ltda.

Tras 11 días de trabajo por parte de los buzos, el buque quedó sin restos de su arte de pesca, por lo que se coordinó con la Gobernación Marítima de Punta Arenas, la respectiva inspección de máquinas del Pesquero Betanzos, por parte de un inspector calificado.

Es así, como el día sábado 1 de junio se efectúo una inspección parcial de máquinas debido al problema de acorbatamiento del Buque Betanzos, y que fue realizada por parte del Jefe de la Comisión Local de Naves de la Gobernación Marítima de Punta Arenas, Teniente 1° Víctor Marín Díaz, quien llegó a la Isla Rey Jorge, alrededor de las 10:00 hrs, en Aerovías DAP y durante la inspección se realizaron pruebas operacionales al sistema de propulsión con un resultado satisfactorio, quedando revalidado el certificado de seguridad de la nave, en condición operativa, lo cual, le permite continuar con su operación comercial en la zona.