La fotografía de un beso entre dos chicas francesas se ha convertido en los últimos días en todo un ícono del amor gay al viralizarse rápidamente por redes sociales.

Lo que pocos saben, es que las jóvenes de la imagen inmortalizada por el fotógrafo de la agencia AFP Gérard Julien, son dos heterosexuales que quisieron manifestar su apoyo a la comunidad homosexual y de paso… provocar a un grupo de conservadores que protestaban frente a la prefectura de Marsella contra un proyecto del gobierno de François Hollande, que busca permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Tras el éxito de la foto, la revista gay Têtu logró contactar a las chicas con el fin de conocer sus impresiones al respecto. Se trata de Julia (17) y Auriane (19), dos amigas que pasaban casualmente por el lugar de la manifestación -en la que también había un grupo pequeño de contramanifestantes- y decidieron expresar su postura de una particular forma.

“Le dije a Julia, ‘dale, nos ponemos en el medio y nos besamos delante de todos’. Al principio se lo tomó en broma, ¡pero cinco minutos después ahí estábamos!”, contó Auriane.

“Creo que no se necesita ser homosexual para apoyarlos. Es un gesto de solidaridad puro y simple. Yo estoy a favor de lo que esos manifestantes no quieren. Frente a ellos éramos tan pocos… No servía de nada hablarles porque se mantienen firmes en su posición. Y tampoco servía de nada gritarles o insultarlos porque se ponen a la defensiva”, señaló Julia.

Más tarde, Ariane confesó: “Personalmente tenía ganas de molestarlos, de provocarlos un poco, pero sin generar un escándalo”.

Y lo lograron, pues el séquito de conservadores quedaron estupefactos ante la escena e incluso le gritaron cosas como “¡Asquerosas!”.

Por otro lado, el fotógrafo que captó el momento preciso señaló que estaba en su día libre, pero al presenciar la escena tomó su cámara para inmortalizarla porque lo vio como un “contraste entre dos culturas, dos generaciones”.

http://youtu.be/gHCWAYzqV4c

Gérard Julien (C)

Gérard Julien (C)