La Dirección Nacional de Aduanas analiza la posibilidad de reconstruir su dependencia de Talcahuano en el mismo lugar donde se emplazaba y que fue azotada y destruída por el tsunami tras el terremoto del 27F.
El día del desastre, el antiguo edificio de avenida Blanco Encalada, a un costado del puerto de Talcahuano, recibió la fuerza del oleaje, y frente a sus oficinas quedaron embarcaciones y containers.
Era la dirección regional de Aduanas, donde esa madrugada perdió la vida Juan de Dios Gutiérrez, de 70 años, guardia de seguridad privado quien falleció en su puesto de trabajo.
Han pasado dos años y siete meses de la tragedia y hoy el servicio atiende en el edificio Don Cristóbal, muy cerca de donde se ubicaba la antigua y centenaria aduana.
El director nacional de la repartición, Rodolfo Álvarez, confirmó a La Radio que aunque no se ha tomado aún una determinación sobre el emplazamiento del nuevo edificio, es muy probable que sea en el mismo lugar, porque dijo que la vulnerabilidad no es determinante.
Las oficinas terremoteadas y azotadas por el tsunami fueron después víctimas del saqueo y la destrucción, lo que hizo imposible retomar las labores en dicho edificio.
Durante algunas semanas tras el terremoto, el servicio fue reubicado en Hualpén, pero sólo por un tiempo, porque luego el servicio volvió al centro de Talcahuano, donde hoy atiende en el Edificio Don Cristóbal, esperando sus funcionarios la definición de un emplazamiento definitivo.
