Amnistía Internacional denunció una intensificación del acoso y las detenciones de opositores en Cuba, contra los que las autoridades de la isla aplican “nuevas tácticas” represivas, en un informe publicado este jueves en Londres.
“Cuba está siendo escenario de una intensificación de la represión en lo que se refiere a los derechos humanos”, declaró Gerardo Ducos, investigador de Amnistía Internacional sobre Cuba y coautor del informe títulado “Represión sistemática: acoso y detenciones breves por motivos políticos en Cuba”.
Amnistía, que tiene prohibido el ingreso en el país desde 1990, afirma en su su estudio que “el acoso y las detenciones contra disidentes políticos, activistas de derechos humanos, periodistas y blogueros de todo Cuba han experimentado un brusco aumento”.
Según la organización de defensa de los derechos humanos, la liberación de decenas de opositores al régimen en los dos últimos dos años no sólo “no fue el prólogo de un cambio en la política de derechos humanos”, sino que dio nacimiento a nuevos métodos para “silenciar” a los opositories.
“Las tácticas han cambiado”, subrayó Ducos. “Después de las liberaciones colectivas de presos de conciencia en 2011, hemos visto a las autoridades agudizar su estrategia de silenciar a la disidencia mediante el acoso a activistas y periodistas, a los que se somete a detenciones breves y actos públicos de repudio”, agregó Gerardo Ducos.
Según Amnistía, estas personas permanecen detenidas “entre unas horas y varios días”, y a menudo sometidas durante ese lapso de tiempo a “interrogatorios, intimidación y, ocasionalmente, palizas” sin que sus familiares sean informados sobre su paradero.
La Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), ilegal pero tolerada por el régimen cubano, contabilizó 6.134 detenciones de “corta duración” en Cuba a lo largo de 2011, lo que representaba según ella un incremento de alrededor de 50% respecto a 2010, y registró otras más de 1.200 en lo que va de año, según sus informes mensuales.
Amnistía cita, entre otros, el caso del medio centenar de activistas del grupo opositor Damas de Blanco brevemente detenidas antes o después de asistir a una misa en una iglesia de la Habana, a solo días de la llegada del papa Benedicto XVI para su primera visita a la isla del 26 al 28 de marzo.
Amnistía insta a las autoridades cubanas a que ponga en libertad a todos los presos de conciencia, cese “el acoso, la intimidación y la persecución” contra los disidentes y permitan a los periodistas trabajar libremente.
“Lo que queremos es que los activistas puedan llevar a cabo su labor legítima sin temor a represalias”, concluyó Ducos.