Unas 2.600 personas, según la policía, 4.000 según los organizadores, manifestaron el sábado en Bayona (sudoeste de Francia) para pedir una solución democrática del conflicto en el País Vasco, en presencia de Aurore Martin y de Josu Ezparza, militantes buscados para ser extraditados a España.

Una cuarta parte de los manifestantes llegaron especialmente del País Vasco español. Entre ellos se encontraba el diputado de Gipuzkoa Martin Garitano (partido Bildu) quien llegó para saludar al ciudadano español Josu Esparza que, al igual que Aurore Martin, no hizo declaración alguna.

En el cortejo figuraban un número importante de concejales del Partido Socialista francés, la presidenta de la asociación de alcaldes del País Vasco, Christine Bessonart, así como diputados de la izquierda Abertzale y del EELV.

Al final de la manifestación, que se llevó a cabo en calma por el centro de Bayona, el representante de la liga de derechos humanos del País Vasco, Christophe Desprez, declaró que “es necesario ahora dar pasos hacia la apertura de un proceso democrático”.

“Todos los prisioneros que son liberables deben serlo inmediatamente; los otros deben ser reagrupados para que puedan participar en el proceso de solución, todos los partidos prohibidos deben ser legalizados, todas las formas de represión deben desaparecer, y todas las víctimas deben ser reconocidas”, dijo Desprez.