Los denunciantes del caso Karadima y la municipalidad de Peñalolén, lanzaron un decálogo que tiene por objetivo entregar acciones mediantes las cuales los abusos sexuales a menores de edad puedan ser prevenidos.
A raíz de su traumante experiencia, los denunciantes del llamado caso Karadima, James Hamilton, José Andrés Murillo y Juan Carlos Cruz – acompañados por el alcalde de Peñalolén Claudio Orrego – dieron a conocer una decena de acciones que buscan detener de manera radical los abusos sexuales que ocurren en el país contra niños y adolescentes.
Una política de infancia que tiene por objetivo detectar e intervenir oportunamente los factores de riesgo que dificultan el desarrollo de los menores de edad.
Entre los consejos se encuentra no obligar a un niño a estar a solas con una persona que les manifieste algún grado de temor, además de generar una red de confianza con los colegios y sus cercanos para poder detectar a tiempo las conductas reveladoras de que algo pasa o está en riesgo de suceder.
José Andrés Murillo, miembro de la Fundación Confianza, afirmó que a pesar de los terribles casos de abusos sexuales que se han dado a conocer a la opinión pública, no se debe perder la confianza en las Instituciones.
Sin embargo, ésta debe entregarse acompañada de una conducta más alerta y responsable.
Agregó que la Fundación está trabajando para que el Programa de Prevención de Abuso Sexual Infantil, pueda ser apoyado por otras municipalidades del país, como es el caso de la comuna de Maipú donde las gestiones ya están muy avanzadas.
Por su parte, el alcalde de la Peñalolén aseguró que la sociedad debe tomar un papel activo para evitar este tipo de situaciones lamentables.
En nuestro país un 80% de las agresiones sexuales a menores son cometidas por familiares o cercanos, por lo que la prevención es fundamental para evitar este tipo de situaciones.