Vaya originalidad la de los australianos para inventar “deportes” extraños.

Siguiendo la fiebre del “planking” (eso de quedarse horizontalmente tieso como tabla durante horas), la nueva moda es el “cone-ing“: cuyas reglas son pedir lo más seriamente un helado en una ventanilla de comida rápida, para luego cogerlo por el lado equivocado y grabar la reacción del vendedor.

Hilarante, ¿no?

Bueno, la mayoría de las veces no… salvo en el caso de este sujeto en un McDonald’s, que por algún motivo sufrió una especie de colapso nervioso al ver cómo el cliente agarraba con la mano su helado.

Simplemente épico.

http://youtu.be/78DBf2_9Esg