Los típicos carritos de sopaipillas ubicados a las afueras del terminal de Osorno y que nos han acompañado por más de 15 años, ya no estarán.
Esto, porque durante la mañana de este viernes, Carabineros por mandato de la Municipalidad, incautó carros, insumos y productos a los comerciantes ambulantes del sector.
Los cerca de 30 trabajadores que ya se han convertido en parte del escenario típico de la ciudad, quedaron -paradójicamente- en la calle, ya que tras ésta acción, tampoco cuentan con materiales para seguir comercializando sus productos.
Este procedimiento, fue justificado en la falta de permisos municipales para trabajar, a pesar de que han solicitado en diversas ocasiones una audiencia para lograr regularizar su situación. Lo que hasta el día de hoy, no ha surtido efecto ni tampoco han tenido una respuesta por parte de la Municipalidad.
María Baez, quien perdió su carro de sopaipillas, comentó que a quienes hoy le están arrebatando su fuente laboral, corresponden a personas que no tienen otra opción de trabajo por tener una avanzada edad, enfermedades o bien, porque sus antecedentes se encuentran “manchados”.
Cristian González, otro de los afectados, dijo que existe desigualdad respecto a las consideraciones del municipio para la otorgación de permisos, pues si bien en varias oportunidades han solicitado audiencia para obtenerlos, esto no se ha concretado.
Por su parte Karla Benavides, Administradora municipal, señaló que respecto ala situación de estas personas y las acusaciones de favoritismo por el municipio, dijo que hasta el momento se ha solicitado una audiencia por parte de ellos, y que el municipio se encuentra trabajando en generar espacios dignos para que los comerciantes puedan trabajar.
Asimismo, señalo que el futuro proyecto de terminal de buses para la ciudad de Osorno, considera dentro de sus instalaciones espacios para la formalización de comerciantes, por lo que convoco al dialogo, sin embargo estipulando de que se trata de un trabajo que no se concretara en el corto plazo.
Finalmente, tras el decomiso de las herramientas de trabajo, sera cerca de 30 familias las que ad portas de fiestas patrias, quedaran sin forma de obtener sustento, por lo que anunciaron que se organizaran para solicitar una audiencia ante el municipio local durante el próximo lunes, donde de no ser escuchados no descartan mobilizarse, anunciando que incluso se encadenaran el el sector hasta obtener una solución.
Lo que han destacado tanto quienes vieron el procedimiento como los propios comerciantes, es que a pesar de que les están arrebatando su único medio de sustento, ninguno ha puesto mayor dificultad, ya que aseguran, ellos sólo quieren poder trabajar y ruegan por que la situación se revierta.
