Sigue el debate técnico respecto de la objeción de conciencia institucional y el libre acceso a abstenerse a hacer abortos que el Ministerio de Salud entregó a las clínicas, permitiéndoles continuar con los convenios con el Estado, pese a marginarse de la ley.

El rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, afirmó que el 12 de marzo enviaron una carta a la cartera de sanidad, solicitando que cambiáse el protocolo, tal como terminó haciéndolo la institución.

Sánchez además descartó que la normativa haya sido modificado a la medida de la casa de estudios.

La subsecretaria de Redes Asistenciales, Gloria Burgos, explicó que el cambio en el protocolo tiene como objetivo beneficiar a una mayor cantidad de gente, con prestaciones en las clínicas que podrían quedar fuera de los convenios al ser objetores de conciencia, como lo planteaba lo redactado por la antigua administración.

Sin emabrgo, para la presidenta del Colegio Medico, Izkia Siches, existe un rol del Estado de velar por que la Ley de Aborto en Tres Causales sea garantizada para todas las mujeres sin distinción. Y, a su juicio, el cambio en el protocolo va en la dirección contraria.

El pasado lunes, el ministro de Salud, Emilio Santelices, defendió los cambios en la norma, afirmando que el año pasado, más de 700 mujeres, en estado crítico, fueron derivadas a centros privados para recibir prestaciones obstétricas, a través de convenios con clínicas, acuerdos que deberían terminarse con el protocolo antiguo con establecimientos objetores de conciencia.