Este jueves el Gobierno sinceró su postura frente a la Reforma Laboral, al explicar los ministros que si bien apoyan la huelga es efectiva, era necesario dar garantía a las pequeñas y grandes empresas.
Esto, con el fin de que no se vean afectadas sus operaciones frente a un movilización. Así lo expresaron las autoridades del Ejecutivo, al momento de resumir la indicación sobre ecuaciones necesarias.
Si bien ésta es distinta a la indicación presentada en diciembre pasado, la que originó quiebres dentro de la Nueva Mayoría, este nuevo texto de igual forma, faculta al empleador a trasladar a un funcionario no sindicalizado a un puesto que esté en huelga, aún cuando en el contrato no esté estipulado.
Punto que generó rechazo dentro de la Central Unitaria de Trabajadoresy en los sectores más progresistas de la Nueva Mayoría.
El portavoz de la Moneda, Marcelo Díaz, reconoció que si bien, buscan la huelga efectiva, deben dar garantías a quienes no están sindicalizados para que puedan efectuar su trabajo, asegurando que “tenemos la convicción de que la indicación que presentamos ayer, dan cuenta de nuestro objetivo de que los trabajadores puedan cumplir su trabajo, acorde lo acordado en contrato”.
El titular de Hacienda, Rodrigo Váldes, pidió que se entienda que como Gobierno deben velar por las pequeñas y medianas empresas, sosteniendo que “la clave es la proporcionalidad“.
Por su parte, la ministra del Trabajo, Ximena Rincón, declaró que “no es la letra del contrato lo que prima, si no que lo pactado con el empleador”, agregando que si bien “se respeta a los trabajadores en huelga, se debe respetar a aquellos que si desean trabajar“, culminó.
Desde el Gobierno, se comunica que lo relevante ahora, es contar con los votos para materializar esta transformación en el ámbito laboral.
